El concejal de Urbanismo de Santiago, Iago Lestegás, ha detallado este miércoles la modificación del ‘Plan Especial de Protección y Rehabilitación de la Ciudad Histórica’ en la que se incluye, además de la limitación de la apertura de nuevas tiendas de souvenirs y de negocios automatizados como tiendas 24 horas, la prohibición de apertura de nuevos establecimientos de juego como casinos, salas de bingo o casas de apuestas.
El objetivo, ha reivindicado Lestegás, es tratar de mantener la función residencial y los servicios a los residentes que vivan en la zona histórica de la capital gallega.
En rueda de prensa, el edil ha recordado que el origen de esta modificación parte de una providencia firmada en junio del año pasado en la que se comenzó a definir una nueva regulación de usos con cinco objetivos: contener la tendencia de especialización funcional del comercio de la ciudad histórica en actividades orientadas al turismo; identificar los ejes y zonas donde es necesario mantener el uso comercial en plantas bajas; priorizar la implantación de los comercios de proximidad que atienden a las necesidades cotidianas de los residentes; proteger los comercios históricos que forman parte de la memoria colectiva; y establecer condiciones para la oferta de bienes y servicios que no proporcionen servicio directo a los residentes.
Así, en el documento aprobado el lunes en junta de gobierno, el Ejecutivo local ha puesto el foco en mantener y reforzar ese uso residencial, promover el mantenimiento del comercio de proximidad, facilitar la implantación de nuevos usos dinamizadores de la zona y garantizar el equilibrio entre usos orientados a residentes y a turistas.
Se trata de una regulación de usos, ha expuesto Lestegás, «muy pormenorizada» fruto de un estudio desde el punto de vista urbanístico. «Abordamos una de las dimensiones de la problemática, la urbanística; pero detrás de la crisis del comercio de proximidad hay muchas causas», ha reconocido.
Además, en el ámbito de usos condicionados, se incluyen establecimientos de ocio nocturno que ahora deberán presentar un estudio de repercusión que evalúe los efectos del uso que pretenden, así como un proyecto de medidas correctoras en el que expliquen cómo se va a hacer para proteger el uso residencial y que se justifique que no van a tener un uso negativo sobra la población residente.
VIVIENDAS
En cuanto a las viviendas, el responsable de Urbanismo de la capital gallega ha explicado que con esta modificación se eliminará la imposibilidad de convertir locales comerciales en vivienda en San Roque y en Basquiños. Además, en zonas como la rúa de San Pedro, Pombal, Carreira do Conde o Galeras no se podrá implantar vivienda en planta baja.
Asimismo, ha destacado que para dividir o agrupar viviendas se requieren dos condiciones: que los inmuebles resultantes deben tener el programa mínimo y la condición de vivienda exterior y que la división o agrupación no altere la estructura parcelaria protegida ni los elementos catalogados.
En cuanto el programa mínimo, se refiere a las normas de habitabilidad de viviendas de Galicia, es decir, que tenga estancia, cocina, baño, lavadero, tendal y almacén, y una superficie mínima de 40 metros cuadrados útiles, excepto en la rehabilitación de viviendas existentes.
Por otro lado, se autoriza en una serie de edificios la implantación de usos de oficinas, terciario de equipamiento, terciario residencial y comercial con carácter exclusivo o mixto. En este caso, se permiten unos usos más «flexibles» al tratarse de «edificios singulares» en los que «es difícil implantar un uso residencial estándar».
LÍNEA DE AYUDAS
Por otro lado, Iago Lestegás ha explicado que están coordinándose con el Consorcio para tratar de recuperar una línea de ayudas dirigida a comercios que categorizarán como emblemáticos y que tienen un valor sociocultural en la zona, por lo que «dan un valor añadido a la ciudad».
En este sentido, aunque no ha concretado qué comercios se incluirían, ha detallado que el objetivo es «sentar las bases» para que pueda servir a otros departamentos para iniciativas de promoción, ayudas o reconocimiento, con el objetivo final de «mantener la función residencial» de la zona vieja.
Según ha manifestado Lestegás, está previsto que esta modificación se publique en el Diario Oficial de Galicia (DOG) el viernes. Después habrá un periodo de exposición pública de un mes y se notificará a todos los titulares catastrales, así como un mes de alegaciones, informes sectoriales y, a continuación, su aprobación provisional en junta de gobierno y la definitiva en el pleno.