La Audiencia Provincial de Lugo juzgará este martes a un hombre que se enfrenta a cinco años de prisión por arrancarle un dedo a otro de un mordisco en un restaurante de Foz (Lugo).
Según el escrito de Fiscalía, los hechos se produjeron en agosto de 2022, cuando el acusado y la víctima iniciaron una pelea «hasta en tres ocasiones» y, durante la tercera de estas, el acusado mordió el dedo índice de la mano izquierda a la víctima hasta arrancarle la primera falange.
Como consecuencia de estos hechos, este último sufrió lesiones consistentes en un traumatismo craneal sin pérdida de conocimiento y la amputación parcial por mordedura de falange distal del segundo dedo de la mano izquierda.
En este contexto, fue necesaria un proceso quirúrgico «para confección de muñón de amputación, analgesia, antibioterapia y curas». El tiempo de curación fue de 80 días, 19 de perjuicio personal moderado y 71 de perjuicio personal básico.
Por ello, el Ministerio Público solicita cinco años de prisión por un delito de lesiones con agravante de reincidencia, con igual tiempo de inhabilitación para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo.
Además, el acusado indemnizará a la víctima con 8.000 euros por las lesiones sufridas y al Servizo Galego de Saúde (Sergas) por la asistencia médica prestada con 1.244,95 euros.