La multa de 3.000 euros impuesta por la Xunta de Galicia a los Franco por no abrir al público la Casa Cornide, ubicada en A Coruña, en los días establecidos, ha sido declarada firme.
Así lo han confirmado a Europa Press fuentes de la Consellería de Cultura después de que se resolviese el recurso presentado por la familia del dictador. Ahora se les notifica la decisión y se pone fin a la vía administrativa.
El escenario que se abre es o bien que paguen la sanción impuesta o si no están conformes pueden recurrir a la vía judicial, en el ámbito contencioso-administrativo.
Los Franco, propietarios de un inmueble por el que el Ayuntamiento de A Coruña ya inició actuaciones para recuperarlo para el patrimonio público — como se hizo en su momento con el Pazo de Meirás –, están obligados a abrirla al público cuatro días al mes después de que fuese declarada Bien de Interés Cultural (BIC).
Al no hacerlo, fueron sancionados por la Xunta con 3.000 euros de multa, una decisión que la familia del dictador recurrió y que ahora ha sido declarada firme. Todo ello después de que, previamente a la sanción, los Franco no atendiesen a los requerimientos hechos para la apertura del inmueble.
La Casa Cornide pasó a manos de los Franco tras una subasta ganada por Pedro Barrié de la Maza que cedió en la década de los sesenta el inmueble a la esposa del dictador, Carmen Polo, aunque antes había sido patrimonio municipal y estatal.