Los vecinos de los municipios pontevedreses de Campo Lameiro, el limítrofe de Moraña y el de Caldas de Reis, ubicado a tan solo 14 kilómetros del primero, se mantienen en vilo a la espera de la confirmación oficial de las identidades del hombre y de la mujer cuyos cadáveres aparecieron el pasado sábado en un vehículo en el primero de estos ayuntamientos, mientras que de los otros dos podrían ser originarias las víctimas.
Agentes de la Guardia Civil acudieron de nuevo la mañana de este lunes al lugar del hallazgo, donde el vehículo ya ha sido retirado y ya ha sido levantada la zona acordonada, en la cual solo quedan restos de ceniza.
Tal y como ha avanzado la Subdelegación del Gobierno este lunes, las labores de identificación de los cuerpos hallados el pasado sábado «van a tardar varios días, dado el grado de deterioro en el que se encontraron».
Dentro del coche, según fuentes conocedoras del suceso consultadas por Europa Press, se encontraba una mujer completamente calcinada y en el exterior un hombre que tenía parte de su cuerpo quemado.
Las hipótesis que existen sobre la identificación son solo «rumores», según expone el alcalde de Campo Lameiro, Carlos Costa, a Europa Press: «Vecinos dicen que eran dos vecinos de Moraña que llevaban tiempo desaparecidos, pero oficialmente no sabemos nada de momento».
Por su parte, el alcalde de Caldas de Reis, Jacobo Pérez, también es conocedor de estos «rumores», que apuntan a una pareja en la que él era natural de Moraña y ella, de Caldas de Reis: «Los rumores es lo que dicen y estamos a la espera de que se confirme a través del ADN o se desmienta, para tener constancia real».
Sin embargo, a ninguno de los ayuntamientos les consta una denuncia oficial por desaparición. En el caso del regidor caldense, sí es conocedor de «la desaparición de un hombre» que trabajaba en esta localidad: «En caso de que se confirme que son ellos, efectivamente era él», abunda.
Desde el centro de trabajo de este hombre se pusieron en contacto con la Policía Local porque «llevaba varios días incomunicado y sin aparecer en el trabajo». «Intentaron localizarlo, pero fue imposible», ha añadido Jacobo Pérez.
HALLAZGO DE LOS CADÁVARES
El sábado, hasta el lugar de los hechos se acercó, además del alcalde de Campo Lameiro, el alcalde de Moraña, Sito Gómez, y el cura de Campo Lameiro, Fermín Santiago. «Estaba en Pontevedra y me llamó el subdelegado del Gobierno para decirme que habían aparecido dos personas calcinadas en mi ayuntamiento, así que subí para el sitio», ha explicado Carlos Costa.
El hallazgo, que se produjo alrededor de las 12.00 horas del sábado, lo hicieron «dos hermanos que iban dando un paseo por el monte» en el lugar de Caneda, una zona forestal.