El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, ha avanzado la intención de llevar a pleno los presupuestos en una sesión extraordinaria el próximo día 23 de mayo y, de no salir adelante las cuentas, ha advertido de que formulará una cuestión de confianza para forzar su aprobación tras llevar desde el año 2020 con los presupuestos prorrogados.
En una nota de prensa, el Gobierno local ha explicado que el presupuesto «ya se encuentra en intervención en la fase de fiscalización», para lo que el servicio «tiene como fecha límite para emitir su informe el 15 de mayo».
Así, «tras negociar con los grupos de la oposición», el Ejecutivo de Pérez Jácome tiene intención de convocar una sesión extraordinaria del pleno el día 23 de mayo. De no aprobarse en la sesión plenaria, explica, el regidor ourensano formulará una cuestión de confianza para forzar su aprobación.
Según ha detallado, el proyecto prevé un incremento de un 10% en relación con el de 2020 y en el capítulo de gasto social se pretende incrementar un 20%.
En el capítulo de ingresos, el Gobierno municipal afirma que «congela la totalidad de los impuestos» y «prácticamente la totalidad de las tasas, con la excepción de la tarifa del agua, modificada por imperativo de la Comisión Europea».
Paralelamente, añade, «se llevó a cabo una revisión de las bases de ejecución, normativa que acompaña los presupuestos, para asemejarlas a la mayoría de los ayuntamientos de gran población».