La Diputación de Pontevedra ha celebrado este miércoles un pleno extraordinario, solicitado por el grupo provincial del Partido Socialista, para debatir una moción que exigía responsabilidades por la exclusión de Vigo como sede del Mundial de Fútbol 2030.
La sesión plenaria duró 30 minutos y en ella el Partido Popular hizo valer su mayoría absoluta en la Corporación para rechazar la moción iniciativa. Previamente, los populares habían presentado una enmienda de sustitución –que fue rechazada– porque entendían que «la moción del PSOE es destructiva, no constructiva».
Según ha explicado el diputado socialista Gorka Gómez, la solicitud del pleno extraordinario respondió a la «cacicada perpetrada por el PP en el pleno de marzo», según la cual se «vetó la posibilidad de debatir una moción urgente sobre la vergonzosa exclusión de Vigo».
En su moción de este miércoles, los socialistas instaban a la administración provincial a exigir la restitución del estadio de Balaídos como sede y a que reclame explicaciones al presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Rafael Louzán, que fue presidente de esta misma Diputación de Pontevedra con el PP.
Asimismo, la moción demandaba a la Diputación que exigiese al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que demandase las puntuaciones de todas las ciudades candidatas.
En esta iniciativa, el grupo del PSdeG también solicitaba que la Diputación de Pontevedra reclamase la dimisión del conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, como «cómplice de este atropello», y pedía que se reprobasen «las lamentables declaraciones de la presidenta del PP de Vigo» y vicepresidenta del gobierno provincial, Luisa Sánchez.
Según ha manifestado Gorka Gómez, «el partido popular se ha dedicado a atacar la candidatura de Vigo y se ha convertido en el principal defensor de un destacado militante de su partido, el señor Louzán».
La vicepresidenta Luisa Sánchez ha censurado la moción presentada por el Partido Socialista porque «solo busca atacar a la Xunta, a la RFEF y a mí», mientras que «la candidatura de Vigo les preocupa cero».
Por su parte, la portavoz del grupo del BNG, María Manuela Rodríguez Pumar, ha criticado la «falta de elegancia» del PP en el último pleno de la Diputación por negarse a debatir en primer lugar la moción presentada por los socialistas sobre Balaídos e igualmente ha reprochado al PSdeG forzar la convocatoria de esta sesión plenaria extraordinaria para tener su «minuto de gloria» y cobrarse una «revancha» generando un «gasto totalmente innecesario» a las arcas públicas.
Rodríguez Pumar ha justificado la abstención de la formación nacionalista recordando que este tema ya ha sido debatido en el pleno municipal de Vigo y ha valorado como «penoso» que tenga lugar esta «guerra partidista», que «más que aclarar las presuntas irregularidades» solo provoca «ruido» por «intereses de parte».