La Dirección Xeral de Centros e Recursos Humanos ha emitido una instrucción sobre el proceso de admisión de alumnado en centros docentes para el curso académico 2025-2026 que justifica ampliar hasta 25 alumnos por unidad en 6º de Infantil y Primaria si se cumplen una serie de requisitos, entre ellos, si existen más solicitudes de admisión presentadas en fecha que plazas ofertadas.
Según se recoge en la instrucción, se podrán superar los 20 alumnos si después de baremar todas las solicitudes recibidas y como consecuencia de la ampliación de las vacantes, se pueda admitir a alumnado inicialmente no admitido que alegara y justificara puntuación por domicilio familiar o lugar de trabajo en la misma área de influencia del centro solicitado o por hermano/a matriculado en el centro demandado en primer lugar.
Asimismo, la instrucción sostiene que le corresponde a inspección educativa ampliar y validar la oferta en cada centro y nivel educativo en el que se den las circunstancias mencionadas, sin detallar en qué centros escolares existe esta situación.
«NO ES LA NORMA»
Tras esto, fuentes de la Consellería de Educación consultadas por Europa Press han apuntado que los casos recogidos en la instrucción «no son la norma», sino «una excepción derivada exclusivamente de las necesidades de escolarización», algo que, han añadido, «no es nada novedoso», ya que «siempre han operado esas excepciones».
En este sentido, tal y como han ejemplificado estas mismas fuentes, se trata de necesidades cuando no se puede desdoblar por falta de espacio o de que no se quede fuera un alumno cuya familia cambia de país, de comunidad, de ayuntamiento o de barrio, o evitar la separación de hermanos. Una cuestión, han señalado, que sucede también a lo largo del curso cuando llegan escolarizaciones extraordinarias.
Por ello, la Xunta considera que la «afectación al sistema» será «mínima», teniendo en cuenta además «la caída de la natalidad». «Estaba previsto cuando se firmó el acuerdo y quedó a mayores aclarado en la Ley de acompañamiento que blinda su cumplimiento con el máximo rango legal», han aseverado.
En esta misma línea, las mismas fuentes han defendido que en Galicia «no hay subida de ratios» y ven un intento de «confundir a la sociedad y emplear una excepción a la norma para desvirtuar las medidas históricas tomadas en Galicia».
«La ratio máxima en España en Infantil y Primaria es de 25 alumnos por aula. En Galicia, por iniciativa propia, decidimos bajarla de manera progresiva a 20. Comenzamos este curso en 4º de Infantil, seguiremos en el próximo en 5º y así sucesivamente hasta cubrir todas las etapas», han insistido.
Del mismo modo, han trasladado que el próximo curso las aulas de 4º y 5º de Infantil tendrán una ratio máxima «de 20 alumnos por aula». Por lo tanto, han añadido, «las ratios no están subiendo»; «al contrario, están bajando y estamos mucho mejor de lo que fija el Gobierno central».
DENUNCIA CIG
Para la CIG, esta medida muestra que la Xunta deja «en papel mojado» el acuerdo alcanzado entre la Consellería y los sindicatos UGT, CC.OO. y ANPE y que la central nacionalista había rechazado.
En una nota de prensa, la CIG ha asegurado que quienes firmaron este acuerdo «asumían que las ratios cualificadas como ‘máximas’ eran en realidad una referencia», ya que, tal y como denuncia, «expresamente se permitía superarlas».
En este sentido, el sindicato apunta que «sería suficiente con poner un solo docente para todo el centro a mayores para volver a las ratios de partida». Esto, según la CIG, «condiciona totalmente cualquier expectativa de reducción de ratios real».
Además, expone que la administración debería «poner todos los recursos de dotación de plazas escolares para hacer realidad la reducción de alumnado por aula», mientras que lo que se ve es que «el mismo Gobierno gallego que tanto se resiste para admitir que existen zonas tensionadas en el precio de la vivienda, no tiene reparos en alegar que esa tensión en la matrícula en determinadas zonas y centros del país solo se puede solucionar ampliando las ratios».
Por todo ello, la CIG ha vuelto a demandar que se negocie un nuevo texto que «dé respuesta a las demandas del profesorado», entre ellas, menciona reducir el calendario de aplicación de la reducción de ratios y hacerlo ya en todas las enseñanzas, fijando para las nuevas ratios con carácter legal la misma validez que las ratios actualmente vigentes.
También pide recuperar el horario lectivo de 18 horas en Secundaria y de 21 en Primaria, así como reducir «de forma efectiva e inmediata» la burocracia.
RUEDA: «CUMPLIREMOS EL ACUERDO»
Preguntado en relación con este asunto y, en concreto, sobre si la Xunta tiene ya localizadas cuáles van a ser las zonas de Galicia donde pueda justificarse esa flexibilización, tras el Consello de la Xunta, el presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, ha dicho no disponer de los datos concretos, pero ha insistido en que la intención de la administración autonómica es «cumplir el acuerdo» firmado el año pasado «con la mayoría de sindicatos».
Así, Rueda ha apuntado que «si hay malestar» entre los docentes, la Xunta debe «intentar explicar» que va a «cumplir esos acuerdos» y que hará, ha añadido, «una gestión lo más eficiente posible de los recursos públicos cumpliendo la ley».
«Entiendo que puede haber distintas opiniones, pero eso es lo que hace la Xunta», ha zanjado.