El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha defendido este lunes que los técnicos se encargaron de examinar la situación tras el derrumbe registrado en el Hospital Materno Infantil de Ourense y ha remarcado que, si ellos «garantizan que puede seguir la actividad, es porque se puede hacer».
Rueda había sido preguntado, tras el Consello, por las denuncias del Sindicato Médico de Galicia (Simega), que calificó de «lamentable» la situación en la que se encuentra el Materno Infantil tras sufrir el sábado un desprendimiento de parte del falso techo de su tercera planta, exigiendo al Servizo Galego de Saúde (Sergas) una «solución urgente» para evitar más accidentes.
El presidente ha replicado que «la constatación» de que los dirigentes de su Ejecutivo son «conscientes» de que es preciso hacer «obras» en hospitales es que «se están haciendo y, además, importantes inversiones económicas, empezando por el hospital de Ourense.
Al tiempo, tras enfatizar que «afortunadamente» en ese derrumbe «no hubo ningún daño personal, ha esgrimido que son los técnicos los que lo han examinado y los que verán «cualquier incidencia».
«Y si ellos garantizan que puede seguir la actividad hospitalaria es porque puede ser. Estoy absolutamente seguro de que en ningún caso, con la más mínima duda, autorizarían nada. Si hay que tomar algún tipo de medida, que a nadie le quepa ninguna duda de que lo haremos», ha zanjado.