El representante que ha enviado el Gobierno a Monterroso (Lugo) para mediar en el conflicto entre los migrantes acogidos en el municipio lucense y la ONG que gestiona el dispositivo, ONG Rescate, se ha reunido este jueves con las partes, aunque sin avances todavía.
Según ha podido saber Europa Press, la reunión ha tenido lugar esta tarde, con un descanso para dar tiempo a la «reflexión» por parte de los refugiados.
Está previsto que se retome a lo largo de estas últimas horas de la tarde.
Aunque la ONG se ha mostrado abierta a «ceder» en algunos puntos reclamados por los migrantes, no se conocen todavía exactamente cuáles serían esas peticiones ni la postura al respecto de los refugiados.
El grupo lleva denunciando desde el lunes un trato «discriminatorio» por parte de la ONG que se encarga del dispositivo de acogida, asegurando además que no pueden acceder a atención médica ni a asesoramiento jurídico — algo que solicitan por las denegaciones que han ido llegando de sus solicitudes de asilo –.
Así lo han expuesto en un comunicado y lo ha trasladado a Europa Press, Gibril, uno de los inmigrantes que lidera la protesta, que ha llevado al grupo a realizar un encierro simbólico desde el lunes en el hotel donde permanecen alojados.
Según ha explicado, existe diferencia de trato según la procedencia de los inmigrantes, recibiendo un mejor trato los de origen magrebí.
A esto suman que cuando tienen problemas de salud «serios» y le piden a la ONG que los lleven al hospital, «se niegan a hacerlo» y deben costear ellos el viaje.
Critican también la falta de asistencia jurídica. «Hay personas que han ganado su condición de asilo desde hace dos meses sin que nadie del centro les informara de esta situación ni de cómo están nuestros expedientes ni tampoco nos facilitan las citas que tenemos que hacer en la policía para solicitar la documentación que nos piden. Es sorprendente y doloroso el trato que estamos recibiendo», lamentan.