El conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, ve «increíble» que se pueda cuestionar la titularidad de uno de los edificios de los antiguos juzgados de Vigo y ha pedido al Ayuntamiento «sentido común» y que acepte las alegaciones presentadas por la Xunta de Galicia.
Así lo ha señalado ante los medios de comunicación este miércoles en la ciudad olívica tras ser preguntado por la decisión del gobierno local de suspender cautelarmente la licencia otorgada para reformar el inmueble, situado en el número 4 de la calle Lalín, en el que se prevé crear un centro para asociaciones y entidades sociales.
Según ha explicado, el edificio fue traspasado por parte del Gobierno central a la Xunta «hace más de 30 años», por lo que está inscrito en el Registro de Bienes del Ejecutivo autonómico, que es quien paga «religiosamente» el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) desde hace 30 años y quien «cada vez que hay un problema» lo soluciona.
Además, ha recordado que desde que abrieron los nuevos juzgados de Vigo, la Xunta trabaja para darle una nueva vida al edificio y que así las asociaciones de la ciudad tengan un espacio «que demandan desde hace tiempo». Tras presentar el proyecto y disponer de la licencia de obra, ahora el Ayuntamiento la suspende.
«No es de recibo intentar paralizar inversiones importantes en la ciudad», ha reivindicado Calvo, que ha pedido al Ayuntamiento que «rectifique» para que el proyecto, que supondrá una inversión de unos 24 millones de euros, pueda salir adelante.