La Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) ha condenado el ataque con arma blanca sufrido por un enfermero de urgencias y un guardia de seguridad mientras ambos desempeñaban sus funciones en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac).
En un comunicado, urge medidas y remarca que, según datos del Ministerio de Sanidad, en el año 2022 se notificaron un total de 13.210 agresiones a profesionales sanitarios. «El dato parcial de 2023 es de 9.398 agresiones», añade.
El presidente de SEMES, el doctor Tato Vázquez Lima, ha mandado un mensaje de apoyo a las víctimas, al tiempo que insiste en la situación por este tipo de casos. «Al problema de las agresiones en los Servicios de Urgencias tenemos que darle una vuelta entre todos: Ministerio de Sanidad y Comunidades Autónomas, hay que cambiar esta dinámica que acontece de nuestros servicios».
«Es inadmisible que un enfermero, un médico o un técnico de emergencias vean su seguridad comprometida mientras desempeñan su labor, que no es otra que salvar vidas». Además, el presidente de SEMES insiste en que no se trata de «hechos aislados». «Suceden hechos como este cada mes, porque no solo son las agresiones físicas, también las verbales».