El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha garantizado este viernes que el nuevo trazado de la autovía A-52, en túnel desde la ciudad hasta O Porriño, se va a hacer «sí o sí», pese a la oposición de «unos poquitos vecinos» o al rechazo «del PP y del BNG», y ha advertido: «Si alguien cree que por protestar van a parar la autovía y nos van a llevar a la época de los carros de bueyes están equivocados, esto es Vigo».
A preguntas de los periodistas en una rueda de prensa, el regidor ha explicado que la tramitación de esa actuación todavía está en fase de anteproyecto, y ha avanzado que los vecinos que se oponen serán «escuchados» cuando «llegue el momento».
Con todo, ha advertido de que las protestas no van a paralizar esa obra, «se pongan como se pongan» quienes la rechazan. «No nos van a devolver a la época de los carros de bueyes (…), a algunos, si los dejamos, nos llevan a las pallozas», ha proclamado.
Caballero ha recordado que la vía actual es «lenta e imposible» y, en ella, «lamentablemente muere gente», por lo que ha reiterado que «esta broma de que uno levantaba la mano y se paraban las cosas, se acabó».
El regidor ha recordado que el nuevo trazado tiene una inversión de casi 400 millones de euros que pagará el Gobierno de España y ha denunciado que el PP «se está moviendo» para paralizarla. Tras recordar que, en su día, «Feijóo dijo que no» a la nueva autovía, ha denunciado que ahora trasladan su rechazo a través de «una senadora», en alusión a la también alcaldesa de Mos (municipio afectado por el trazado), Nidia Arévalo.
Caballero ha criticado que existe también oposición por parte del BNG y ha repetido el mensaje: «Que se olviden, esa autovía –y todo Vigo lo sabe– es imprescindible. El problema es que llega 30 años tarde».
Finalmente, ha asegurado que el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible considera esa actuación «la obra más prioritaria y más importante en toda España». «Y lo mismo el alcalde, y la ciudad también», ha apostillado.