Alejandro M.R., acusado de participar en la paliza mortal a Samuel Luiz en julio de 2021 en el paseo marítimo coruñés y en libertad provisional por estos hechos, ha manifestado que su participación ese día se limitó a intentar «separar» en un primer momento tras comprobar que había una pelea, pero ha negado que hubiese golpeado a alguien. «No he agredido a nadie».
Así lo ha expuesto en su declaración tras aceptar hacerlo ante todas las partes personadas en el juicio que se celebra en la Audiencia de A Coruña. Según su relato, tras salir desplazado del «tumulto», opta por no querer «saber nada» y coger otro camino. «Me desvinculo de esa agresión», ha apuntado.
Sobre el día de los hechos, ha explicado que subió las escaleras próximas al local de ocio donde había estado con los acusados y otras personas — ratificando que a Diego M.M. lo echaron por su «mala actitud»– porque escuchó «gritos» e interpretó «que hay algún tipo de pelea». «Vienen corriendo conmigo otras personas, visualizo el tumulto y veo que Diego estaba lanzando una serie de puñetazos».
«Había unas personas rodeándolo, había una multitud, Catherine me dice no hagas nada, es todo culpa de Diego, yo no sé por qué se inicia la agresión, intento acceder — a su amigo — con intención de separar». También ha expuesto que vio a otro de los acusados, Alejandro F.G., «cogiendo del cuello» a Samuel y ha dicho que luego a Catherine y a Kaio acercarse hacia la dirección en la que iban los senegaleses tratando de ayudar a la víctima.
(Habrá ampliación)