Unións Agrarias (UU.AA.) ha lanzado un «grito desesperado» a la Xunta para que actúe ante los daños ocasionados en prados en la montaña de Lugo por una plaga de ratas, que afecta a más de 3.000 hectáreas en varios municipios.
Este jueves, los responsables de la oficina de Unións Agrarias en Sarria y Becerreá, Miguel Tomé e Iván Raposo, así como el responsable de Área Externa del sindicato agrario, Félix Porto, han dado una rueda de prensa en Sarria (Lugo) para denunciar estos «daños irreparables».
Explican que esta es una problemática que viene de hace años, pero que se ha acrecentado en los últimos meses por la «acción incontrolable» de las ratas. Una cuestión que afecta principalmente a la zona entre Triacastela y Pedrafita do Cebreiro, pero que se ha extendido también a Folgoso do Courel y Samos.
El sindicato se puso en marzo en contacto con la jefatura territorial en Lugo de Medio Ambiente, y aunque se comprometieron a nueva reunión para buscar solución «no hubo más contactos».
Reclaman que se tomen medidas como pueda ser un trampeo masivo. Con todo, UU.AA. señala que «no es responsabilidad de una consellería», sino también de Medio Rural y de «todo» el Gobierno gallego por los problemas sanitarios que pueda haber.
DETERIORO DE MAQUINARIA
Así, se produce un «doble coste» para las explotaciones, dado que a la pérdida de forrajes se une el deterioro de maquinaria por los túneles que se crean debajo de la tierra, que dejan «impracticables» los terrenos.
Ante esto, los ganaderos advierte que explotaciones de alta montaña que tienen dificultades para pasar el invierno pueden verse abocadas a cerrar si no se toman medidas, dado que los animales no tienen que comer.
