El palista cangués Rodrigo Germade admitió que las embarcaciones de Alemania y Australia, que le sorprendió, han «corrido más» y que la medalla de bronce lograda con el K-4, junto a Saúl Craviotto, Marcus Cooper y Carlos Arévalo, en los Juegos Olímpicos de Paris 2024, le «sabe a oro».
«Se ha incrementado muchísimo el nivel, sabíamos que se iba a plantear una final muy, muy exigente. Estábamos muy bien preparados, al final faltó una décima y media. Bueno, hicimos una carrera bajo mi punto de vista fantástica y bueno, han corrido más y a mí me sabe oro», reconoció en la zona mixta de Estadio Náutico Vaires-sur-Marne.
Germade explicó que la baza de la embarcación española era la salida, donde se situaron en cabeza hasta los 500 metros. «Tenemos una primera parte de carrera muy fuerte y la explotamos al máximo. Lo que pasa es que era una regata con viento en contra y se hace un pelín más dura. Sabíamos que teníamos que sufrir al final y creo que lo hemos hecho muy bien», comentó.
La lástima, según el palista de Cangas, es que Australia les apartó de la plata que conquistaron en Tokyo 2020 por una décima. «Es lo que hay. ¿Australia? Sí, sí, me sorprendió muchísimo, pero ya llevaba tiempo demostrando un nivel muy alto», subrayó con su bronce colgado al cuello antes de marcharse a estirar.
Germade junto a Carlos Arévalo y la otra pareja formada por Marcus Cooper y Adrián del Río intentarán lograr este viernes la clasificación para la final del K2 500 metros, que se disputa apenas unas horas más tarde (13:30 horas) en el complejo náutico muy cercano a Disneyland Paris.