Un hombre acusado de intentar matar en agosto de 2018 a su expareja en Ribeira (A Coruña) ha negado tener intención de acabar con su vida y ha alegado que portaba un cuchillo para «autolesionarse» si ella no quería retomar la relación sentimental.

«Yo quería que me diese otra oportunidad y llevaba un cuchillo porque si me decía que no, iba a autolesionarme», ha confesado el procesado al tribunal de la sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña que juzga a este hombre por un delito de intento de homicidio, por el que el Ministerio Público solicita para él diez años de prisión.

En su escrito de calificación, Fiscalía sostiene que el hombre abordó a la mujer cuando salía de su vivienda y le intentó clavar en el cuello un cuchillo de cocina.

Antes de tratar de clavarle el arma, el hombre, al que en un primer momento la víctima no reconoció por ir con la cara tapada parcialmente, la agarró por el cuello, arrojándola contra dos vehículos estacionados por lo que la mujer se golpeó en la espalda.

El posterior ataque con el cuchillo, según el fiscal, fue motivado por «venganza» ante la negativa de la víctima de reanudar la relación sentimental con él, por lo que trató «de imponer su voluntad y dominarla por su condición de mujer».

NIEGA INTENCIÓN DE MATAR

Sin embargo, frente al relato de la Fiscalía, el hombre ha declarado que portaba el cuchillo con la intención de atentar contra su propia vida. «No, para nada. No, no hice», han sido las palabras expresadas por el acusado, quien solo ha respondido a preguntas de su abogado, al ser cuestionado sobre si intentó acuchillar a la que fuera su pareja.

Según el relato de este hombre, fue «ella quien se abalanzó hacia mí y se cayó al suelo». «Al agarrar el cuchillo se debió de cortar y el resto de lesiones se las haría en la caída», dice este hombre, que asegura tener problemas con el alcohol y las drogas.

LA VÍCTIMA

Frente a esto, y siguiendo el relato presentado por la Fiscalía, la víctima ha declarado que el hombre, que iba «completamente tapado», estaba escondido en un portal cuando la sorprendió. Sin mediar palabra, «me agarró por el cuello y me quería meter entre dos coches», relata esta mujer, quien al ver que el cuchillo se dirigía hacia su cuello, interpuso la mano para hacer frente al ataque.

«Vi cómo dirigía el cuchillo hacia mi cuello», ha indicado la víctima, quien mantuvo un forcejeo con el hombre hasta que, al escuchar los gritos de varios vecinos desde la ventana, él «se asustó y huyó».

GRITOS DE LOS VECINOS

Ese mismo verano, dice la víctima, el hombre habría tenido conocimiento de que ella tenía una nueva pareja. Ante el tribunal, la mujer ha expresado su temor tras lo ocurrido: «A mí me cambió la vida. Yo era feliz y ahora tengo dudas sobre el futuro. Soy consciente de que algún día estará en la calle y temo por mí y por mi hija».

El relato de la mujer ha sido respaldado por dos de los vecinos que salieron de sus viviendas alertados por los gritos de socorro. Ambos testigos han reconocido haber visto al acusado portando un cuchillo de grandes dimensiones.

Uno de estos testigos ha trasladado al tribunal las palabras que le manifestó la mujer cuando acudió a socorrerla: «Me dijo que él la había intentado matar con un cuchillo».