La Audiencia Provincial de Ourense ha sentado en el banquillo a seis acusados por tráfico de drogas durante la pandemia, que han llegado a acuerdo de conformidad con Fiscalía para reducir la petición de penas, que pasan de ocho a cinco años para los principales acusados.
Así, el Ministerio Público retira el delito de pertenencia a grupo criminal, por lo que reduce de ocho a cinco años de prisión la petición de pena para tres de los procesados, que reconocen los hechos a cambio de esta condena y 80.000 euros de multa.
Además, otro de los acusados acepta tres años de cárcel y 1.000 euros de multa, y los dos restantes se conforman con año y nueve meses de prisión y 1.000 euros de multa. A cinco de los acusados se le aplicó la atenuante por consumo de drogas, el restante no era consumidor.
Los hechos se remontan a febrero del 2020, cuando el grupo de estupefacientes de la brigada de Ourense estableció un dispositivo de vigilancia sobre una vivienda de la ciudad al haber tenido conocimiento de que se trataba de un punto de venta de drogas. El piso pertenecía a dos de los acusados que hoy han llegado a un acuerdo en la Audiencia.
Los agentes comprobaron que durante el estado de alarma fueron muchos los clientes que salieron del piso con cocaína, marihuana o hachís, según señalaba el escrito fiscal en el que se recoge que pese al confinamiento siguieron dedicándose a la venta de sustancias estupefacientes, a través de llamadas telefónicas con sus clientes, a los que uno de los acusados citaba frente a la puerta de un supermercado.
Según el escrito fiscal los acusados se desplazaban habitualmente en taxi o patinete, aunque también en un vehículo particular. En junio del 2020, con una orden de registro, los agentes accedieron a varios domicilios donde encontraron a uno de los acusados arrojando por la ventana una bolsa que resultó contener cocaína.
Además, encontraron cannabis, cocaína, pastillas de MDMA y diversos aparatos electrónicos como teléfonos móviles o dos balanzas de precisión y también una libreta con anotaciones. También hallaron dinero en efectivo que provenía de la venta de sustancias.
Según Fiscalía, actuaron «en todo momento concertados entre sí y de forma estable con la finalidad de distribuir» estas sustancias. Así pues, pedía casi cincuenta años de prisión, 8 años para cada uno de los acusados por un delito de tráfico de drogas que causan grave daño a la salud y de drogas que no causan grave daño a la salud. También acusaba a tres de los hombres por un delito de pertenencia a grupo criminal.
Pedía a mayores 100.000 euros de multa para cada uno de los implicados, sustituibles por seis meses más de prisión de no ser posible efectuar el pago, y la expulsión del país cuando cumpliesen la condena para dos de los acusados, con prohibición de volver a entrar en el territorio español por tiempo de 10 años.