El colectivo ecologista Adega ha advertido que la planta de Altri en Palas de Rei (Lugo) se convertiría, de llevarse a cabo, en la fábrica de celulosa «más contaminante» de España, según las conclusiones del análisis de la documentación del proyecto hecha por el biólogo y profesor de la USC, Ramón Varela.
El experto ha ofrecido este jueves una rueda de prensa en Santiago junto al secretario técnico de Adega, Fins Eirexas, y la portavoz de la Plataforma Ulloa Viva, Mónica Cea, que han denunciado que la información facilitada por Greenfiber para la tramitación del proyecto de A Ulloa está «incompleta», un hecho por el que consideran que «sólo por ello» las administraciones deberían desautorizar la iniciativa.
En todo caso, Ramón Varela ha subrayado que, a pesar de que el documento «de más de 1.000 páginas» elaborado por los promotores de la planta «sólo dedica una» al apartado de emisiones, ésta revela que las de la factoría de Palas serán «muy superiores» a las principales fábricas de producción de celulosa del Estado.
De hecho, ha incidido en que la planta de Ence en Lourizán tiene unas emisiones «mucho más bajas» que las reconocidas por Altri sin que eso, como ha matizado, «signifique» que la pastera de la ría de Pontevedra, levantada en la década de 1960, «funciona bien».
Para el biólogo, «resulta sorprendente» que una planta diseñada en el año 2023 «vaya a contaminar más» que una fábrica con más de medio siglo de actividad, máxime cuando la empresa asegura que operará «con las mejores técnicas disponibles».
Asegura que la documentación aportada por la empresa no desagrega las emisiones que provocarán la producción, por un lado, de lyocell y, por otro, de celulosa y que, como ha resaltado Varela, la propia compañía reconoce que será la actividad principial.
Así, apunta que Greenfiber «sólo» detalla las emisiones de cuatro elementos contaminantes –partículas grandes (PM10), óxidos de azufre, óxidos de nitrógeno y compuestos volátiles reducidos de azufre– y que obvia las referidas a partículas finas (PM2,5), dióxido de carbono y monóxido de carbono.
Su ausencia impide, según ha afirmado Varela, «conocer» la huella de carbono que ocasionaría el proyecto, algo que Adega ve suficiente para que decaiga la tramitación ambiental y que considera un argumento en el hipotético caso de que la implantación de la fábrica tenga recorrido judicial.
Además, también echan en falta que Greenfiber informe de otros contaminantes como el amoníaco, óxido nitroso, dioxinas y furanos, carbono orgánico total, metano, mercurio, cadmio y otros metales pesados.
El experto ha resaltado que Altri reconoce emisiones de 252,5 toneladas al año de partículas PM10 frente a las 43,5 que salen de Ence Pontevedra, que emite cuatro veces menos de los óxidos de nitrógeno que tendría la factoría de A Ulloa y más de 25 veces menos de dióxido de azufre.
En comparativa con las celulosas del Estado, Ramón Varela ha afirmado que Altri «estaría muy porn ecima de las emisiones conjuntas» de las ocho factorías principales. Serían, según sus cálculos, cuatro veces más en el caso de partículas PM10 y 4,67 veces más en óxidos de azufre y sólo estaría por debajo en emisiones totales de óxidos de nitrógeno.
Así las cosas, el experto ha subrayado que estas emisiones podrían ocasionar lluvias ácidas en la zona, lo que «amenzaría» las explotaciones agroganaderas de la zona, además de poder alcanzar «en determinados días» a otros puntos de la geografía gallega como el sur de la provincia de Lugo.