El Ayuntamiento de Verín ha celebrado este viernes un pleno extraordinario en el que se ha aprobado definitivamente la remunicipalización del servicio de agua y saneamiento, con el objetivo de realizar una gestión directa «más sostenible y eficiente».
Tal como ha informado el gobierno local, hasta ahora este servicio estaba en manos de una empresa concesionaria, con la cual se ha llegado a un acuerdo que supondrá el pago de 875.000 euros, distribuidos en cuatro cuotas anuales.
En concreto, este montante comprende el canon adelantado en el momento de la privatización, los intereses correspondientes, el valor del inmovilizado material de la empresa y una compensación por el lucro cesante.
«Cabe destacar que este importe será financiado con la generación de ingresos del servicio de agua municipalizado, que se estima en 500.000 euros anuales en los próximos cuatro ejercicios», ha reivindicado el Ayuntamiento.
El alcalde, Gerardo Seoane, ha celebrado esta iniciativa, que permitirá «corregir las deficiencias estructurales en la red de saneamiento» que provocan, según ha lamentado, «el deterioro ambiental del río Támega» y dificultan la prestación de un servicio «óptimo» a la ciudadanía.