La conselleira de Política Social, Fabiola García, ha insistido este viernes en la «novedad» del ‘Bono Coidado no Fogar’, después de que el Colexio de Traballo Social remitiese a la Xunta un escrito en el que le instan a «rectificar» y aclarar los términos de la medida, argumentando que «no es una ayuda nueva», sino «una actualización de las libranzas» que está «saturando» los servicios sociales de peticiones y consultas.

En concreto, Cristina Díaz, miembro de la Xunta de Goberno de este colegio profesional, trasladó a Europa Press que cuando los trabajadores conocieron el anuncio de la Xunta de este bono pensaron que «era algo nuevo», adicional a las prestaciones existentes. «Pero leyendo la letra pequeña, descubrimos que solo es una adaptación de la normativa estatal a la gallega», afirmó.

La modificación estatal de la normativa reguladora de la Ley de Dependencia, apuntó la misma profesional, incrementó el precio de hora de libranza para cada grado de dependencia, elevando la cuantía máxima para grandes dependientes hasta los 5.000 euros anuales, el importe de este bono.

Sin embargo, matizó, el anuncio por parte de la Xunta del ‘Bono Coidado no Fogar’ generó «una avalancha» de consultas de usuarios que creían que se trataba de «una ayuda adicional» a las libranzas que ya tenían concedidas, generando «saturación» en los Servicios Sociales. «Al recibir la carta del presidente, acudieron en avalancha a solicitar esta supuesta nueva ayuda», afirmó Díaz.

El Gobierno gallego, por su parte, ya en la pasada jornada, remarcó que solo Galicia lleva el tope máximo de prestación de la libranza a todos los niveles de dependencia.

COLECTIVO «INFORMADO»

A preguntas de los medios este viernes, la responsable de Política Social ha defendido que «todo el colectivo» de trabajo social de Galicia fue informado a través de la aplicación informática ‘Matiass’ de las características de la medida para que «atendiesen todas las dudas que pudiesen tener los ciudadanos».

«Los ciudadanos pueden tener dudas con respecto a este ‘bono’ como con cualquier otra ayuda, tanto de la Xunta, como municipal o de la Diputación. Por eso acude normalmente al trabajador social, que es su profesional de referencia en cada ayuntamiento para responder a todas estas dudas», ha indicado, antes de esgrimir que también se informó por carta a la ciudadanía de los requisitos que había que cumplir.

«CLARO QUE ES UNA AYUDA NUEVA»

En cuanto a la polémica suscitada en torno al carácter novedoso o no de la medida, García ha defendido que «claro que es una ayuda nueva» porque «las personas a las que van destinadas son distintas». «Hay personas que la percibían, pero otras muchas nuevas que no y que están acudiendo a los trabajadores sociales para solicitar este bono», ha dicho.

«Ahora es un bono universal, algo que no existía. Un bono que va dirigido a todas las personas que quieren ser cuidadas en su casa. Se les concede con independencia de su grado (de dependencia), y no había ninguna ayuda ni prestación de este tipo, con independencia de su capacidad económica», ha aseverado.

«Por eso decimos que es una medida nueva y que beneficia a mucha gente. Algunos ya recibían la prestación de cuidados y, ahora, pues otra mucha gente que desea ser cuidada en su casa, en vez de ir a un centro, lo podrá ser con esta nueva prestación. Podrá ser atendida por un familiar, por un amigo, por un vecino o por la persona que decida», ha insistido.

De hecho, la conselleira ha recalcado que es la persona dependiente «la que elige por quién quiere ser cuidada». «Puede ser cualquier persona, quien decida», ha insistido, si bien ha admitido que, en los casos de dependencia grave, el cuidado requiere que haya «convivencia», para poder realizar las tareas de cuidado, a lo mejor «24 horas al día».