Los colectivos TreGa (Traballadoras de Residencias Galegas), Modepen (Movemento Galego pola Defensa das Pensións Públicas) y la Asociación Vellez Digna consideran que la Xunta «cerró en falso» la investigación interna sobre las supuestas filtraciones de las fechas en las que las residencias de mayores iban a recibir visitas por parte de los servicios de inspección.
A través de un comunicado, las tres entidades creen que la secretaria xeral técnica de la Consellería de Política Social e Xuventude, María Francisca Gómez Santos, vertió «varias falsedades» cuando anunció a finales de noviembre, en el Parlamento gallego, que «o hay pruebas que apoyen las acusaciones» realizadas ya en verano por la Asociación Galega de Inspectores e Inspectoras de Servizos Sociais (AGISS) sobre esas filtraciones.
«Esta investigación se cerró en falso, con falsas conclusiones, no se buscó en ningún momento esclarecer la verdad de los hechos sino el lavado de cara de la Consellería. No podíamos esperar otra cosa», lamentan TreGa, Modepen y Vellez Digna.
Estos tres colectivos critican que «en ningún momento se llamó a delcarar a ninguna trabajadora ni a ningún familiar, usuarios, pensionistas o asociaciones de vecinos» que «llevan años» denunciando estas prácticas.
No obstante, aunque creen que la próxima incorporación de 10 inspectores nuevos a la plantilla –según una modificación de la relación de puestos de trabajo de la Consellería– es «un paso adelante», se quedará «muy corto».
Así las cosas, TreGa, Modepen y Vellez Digna creen que la Xunta busca «hacer inoperativo» el servicio de inspección para garantizar «la impunidad» de las empresas que promueven y gestionan las residencias.