La Xunta ha mantenido este lunes por la tarde una reunión con los directores de los centros gallegos, que con carácter general están a favor de avanzar en la regulación del uso del móvil. Aunque no les convence la palabra «prohibir», sí consideran que cierta restricción es positiva para la convivencia en el colegio y para la atención en el aula.
En declaraciones a Europa Press, el director del CEIP Felipe de Castro de Noia (A Coruña) y presidente de la Federación Galega de Directivos de Centros de Ensino Público (Fegadicep), Francisco Lires, saluda la intención de la Xunta, confirmada la semana pasada por el presidente, Alfonso Rueda, de ser más restrictivos en la normativa y no permitirl los dispositivos tampoco en el recreo, en el comedor ni en excursiones, entre otros ámbitos.
«Hay que pensar realmente qué les aporta su uso en un centro educativo cuando no lo necesitan para nada», recalca Lires, quien aboga por favorecer las «relaciones interpersonales» en los colegios e institutos porque, de puertas para adentro, los móviles «no tienen mucha cabida».
Aunque el presidente de Fegadicep reconoce que «no se puede vivir de espaldas» a los avances tecnológicos, explica que el uso de los móviles, incluso aunque en el aula ya estaban prohibidos en Galicia desde una normativa del año 2015, hace ocho años, dan «problemas de convivencia y de atención».
«¿Vamos a acabar con el uso abusivo? No lo sabemos, pero por algo hay que empezar», añade, para abogar también por una correcta educación sobre el buen empleo del móvil, algo que «los centros tienen que promover» pero que también depende «de la educación que viene de casa».
Antes de que finalice el año, se convocarán nuevas reuniones en las que se trasladarán aspectos más concretos de la nueva normativa, con la intención de implantarla a la vuelta de las vacaciones de Navidad.
En el encuentro de este lunes con directores, celebrado en formato telemático, ha intervenido también personal de la Dirección Xeral de Saúde Pública de la Consellería de Sanidade, que ha hablado de los problemas de salud mental y de adicción que genera el ‘smartphone’ en niños y adolescentes.
En términos similares se pronuncia Isabel Ruso, presidenta de la Asociación de Directores e Directivos de Institutos de Galicia (Addiga), quien agradece a la Xunta la «información clara» sobre que el uso excesivo del móvil está «siendo perjudicial».
Precisamente, Ruso es directora del IES Eusebio da Guarda en A Coruña, donde este curso se aplicó un nuevo protocolo más restrictivo con los móviles que partió de una propuesta inicial del ANPA y del claustro de profesores, junto a la puesta en marcha de actividades para crear comunidad. «Se solucionaron muchos problemas que había», afirma.
Con todo, esta directora insiste también en que, «en paralelo» al nuevo protocolo de la Xunta, «tiene que ir una formación».
LOS CENTROS CONCERTADOS, A FAVOR
En el marco de las reuniones convocadas por la Consellería de Educación para abordar este debate, este martes habrá otro encuentro ‘online’ con los representantes de las ANPA gallegas. También este lunes, pero por la mañana, los responsables de la administración han hablado con el sector de los centros concertados.
Por parte de la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE) en Galicia ha acudido Ignacio Gay, quien les ha trasladado cuál el modelo implantado en los colegios adheridos a este colectivo. La regla general ya es la prohibición en todos los espacios, si bien estos centros acogen también alumnos de FP de más de 18 años a los que sí se les permite.
Al representante de CECE en Galicia le parece «bien» la elaboración de este nuevo protocolo ante un «tema complejo» y que causa problemas que «el 90 por ciento o más de las veces vienen de fuera». También ve complicado su encaje en las actividades didácticas porque, en materia de tecnología, «los centros ya están equipados» con todo lo necesario.