Centenares de personas han vuelto a salir a las calles de A Coruña este sábado para reclamar a las administraciones que aceleren el proceso para la recuperación y apertura al público de la Casa Cornide, expoliada por la familia Franco durante la dictadura.
Encabezada por los actores Isabel Risco y Fernando Morán interpretado a Carmen Polo y Francisco Franco, la marcha ha partido de la Praza de María Pita hasta la fachada de la Casa Cornide, ubicada en el casco histórico de la ciudad herculina.
Al frente de la manifestación, junto a la pareja de actores haciendo del dictador y su esposa y a un grupo de gaiteros que ha puesto música a la protesta, podía leerse una pancarta que rezaba ‘Devolución da Casa Cornide ao pobo da Coruña. Fransquismo nunca máis’.
Los manifestantes han llegado a las puertas de la casa que pasó a patrimonio de la familia Franco a través de una subasta en la que ejerció de pantalla el empresario Pedro Barrié de la Maza, que adquirió el inmueble para cederlo más tarde a Carmen Polo por un precio muy inferior al que él había abonado.
Esta operación por la que la familia del dictador se hizo con la titularidad del palacete a mediados del siglo XX quedó revelada con el descubrimiento de una carta recogida en un informe elaborado por el historiador Manuel Grandío a encargo del Ayuntamiento de A Coruña.
A raíz de este hallazgo, otro informe, en este caso de enfoque jurídico, determinó que se trató de una operación simulada para dar cobertura legal al expolio.
A las puertas de la Casa Cornide, donde los actores han hecho una ‘performance’ lamentando que les faltaban las llaves para poder entrar, se ha procedido a la lectura de un manifiesto a cargo de Manuel Monge en el que se ha instado a la Xunta y al gobierno local coruñés a mover ficha para favorecer tanto la apertura del inmueble a la ciudadanía como su paso a patrimonio público.
El texto recuerda que existe una moción aprobada por unanimidad en septiembre de 2019 en el pleno de la corporación herculina que aboga por recuperar para el patrimonio de la ciudad este inmueble. «Cincuenta meses después, el ayuntamiento sigue sin presentar esa denuncia judicial», han lamentado los manifestantes.
A la Xunta reclaman que obligue a la familia Franco antes de que concluya el año a abrir la casa para visitas públicas en cumplimiento de su condicion de Bien de Interés Cultural, por la que, como establece la ley, debería poder visitarse «como mínimo» cuatro días a la semana.
Además, piden la retirada de las distinciones de la ciudad y los nombres del callejero en honor a Pedro Barrié de la Maza, Alfonso Molina y Sergio Peñamaría del Llano, «principales responsables del expolio» de la Casa Cornide.