La alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, ha afirmado que continúan abiertos a negociar con la Xunta de Galicia por el Hospital Clínico, pero pone el foco en la falta de plazas de aparcamiento, responsabilidad de la Xunta.
En la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, Sanmartín ha explicado que este mismo lunes han recibido el estudio realizado por la Administración autonómica sobre la situación del hospital.
En base a eso, ha recordado qeu el entorno del hospital es «responsabilidad» del Sergas. En cuanto a los problemas en el transporte público que menciona el informe, la alcaldesa recuerda que ya existen «una serie de líneas importantes», pero avanza que se reforzarán con el nuevo contrato de transporte.
Abordado este punto, la regidora deja la pelota sobre el tejado de la Consellería de Sanidade. «Ya pusimos encima de la mesa una parcela para el nuevo aparcamiento», ha recordado, insistiendo además en que la Xunta debe «asumir» que el 80% de la ocupación es del personal del hospital y que el centro atiende a un porcentaje muy grande de población de fuera de la capital gallega.
«Continuamos abiertos a negociar, con la intención de llegar a un acuerdo cuanto antes. Lo mejor es que la Xunta decida construir el aparcamiento y nosotros cumplamos con la mejora del transporte colectivo», ha insistido.
COMESAÑA DEFIENDE EL INFORME
Por su parte, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha defendido la viabilidad del informe, «un trabajo concienzudo con muchos datos».
Indica que, que el informe señale que el transporte público es deficitario, «será una novedad para algunos, pero otros lo llevamos diciendo mucho tiempo». Lo mismo ocurre, añade, con los accesos, y también con las plazas de aparcamiento, «la parte que nos toca».
«Hay que abordar todo eso junto, de forma técnica y responsable, que es el paso que estamos dando. Estoy seguro que desde el Ayuntamiento se va en esa línea de estudio técnico y de poner soluciones que encajen con medidas técnicas y no con medidas que, a veces, pueden ser más oportunistas», ha defendido.
Comesaña ha concluido insistiendo en «quedarse» con el debate técnico, pero reconociendo que «la solución a este tipo de problema no es única, son varios factores».