Adega ha demandado a la Confederación Hidrográfica Miño Sil que realice una investigación en el riachuelo de Pomeda del municipio de Palas de Rei (Lugo) donde aparacieron decenas de truchas muertas hace unos días.
En un comunicado emitido este lunes, la entidad ecologista ha asegurado que «previsiblemente» este tipo de vertidos tienen origen en las «macroexplotaciones» ganaderas situadas en el lugar de Carteire.
Afirman que estas explotaciones son responsables de la aparición de «espumas», «turbidez» y de «un sustrato gelationoso» en el río en el que fueron localizadas «gran cantidad» de truchas muertas recientemente.
Adega ha resaltado que en la zona se encuadra dentro de una zona de protección para la producción de especies acuáticas piscícolas y salmonícolas, por lo que insta a la Confederación Hidrográfica a velar por su cumplimiento y adoptar las sanciones necesarias en caso de detectarse irregularidades.