El alcalde de Santiago de Compostela, Xosé Sánchez Bugallo, ha destacado que el Ayuntamiento, con cargo a sus presupuestos, «está cubriendo algo más del 70% del coste real del transporte público», una situación que «previsiblemente» se continuará produciendo «en el futuro».
Preguntado por el hecho de que la nueva concesión del bus en la ciudad sitúe el billete ordinario en 1,58 euros, Bugallo ha sostenido que el billete ordinario «es el precio de equilibrio, lo que cuesta el transporte». «Y una cosa es lo que cuesta el transporte y otra lo que paga el usuario», ha afirmado.
En este sentido, ha recordado que, en la actualidad en la capital gallega, «aproximadamente un 30% de los usuarios viajan gratis» toda vez que el Ayuntamiento «está pagando su uso del autobús». «Otro 50 o 60% de usuarios viaja con tarifas bonificadas a través del bono escolar o a través de bonobús ordinario», ha señalado.
Por tanto, ha insistido en que cuando se fija el coste del billete ordinario es respondiendo al «coste de equilibrio». «Es decir, eso sería lo que cuesta un billete de autobús», ha afirmado Bugallo, que ha recordado que el Consistorio lleva 12 años sin actualizar ese precio.
«En Santiago más o menos el autobús cuesta 8 millones y pico de euros. Hay 7 millones de viajeros, pues el sistema actual, con los autobuses actuales, nos saldría en torno a 1,20 euros», ha explicado.
Con todo, ha reconocido que el hecho de que los autobuses vayan a ser nuevos y más unidades tiene un coste que se refleja en el billete ordinario. «Los 86 millones de euros es lo que el ayuntamiento prevé aportar de sus presupuestos para el funcionamiento de este servicio», ha dicho el alcalde.
A partir de ahí, ha explicado que cada año, con motivo de la aprobación de los presupuestos, el gobierno local decidirá «hasta donde está dispuesto a llegar con la subvención del transporte público». «La cifra que ahora mismo estamos poniendo, que es de algo más de 6 millones de euros anuales, es una aportación importante para un ayuntamiento de nuestro tamaño», ha insistido.
Además, preguntado sobre si se retirará la gratuidad absoluta a los billetes a los pensionistas, ha precisado que lo que se garantiza e la convocatoria del concurso es que «cada jubilado tendrá 100 viajes gratis» por lo que «la próxima corporación podrá decidir si en vez de 100 son 700 o si es infinito».
«Lo que sí es cierto es que eso obligará a suplementar la aportación que se le realice a la empresa concesionaria. Esa es la parte que está garantizada, al igual que garantizamos que el bonobus no pueda subir de 0,85», ha dicho para insistir en que el próximo gobierno local decidirá «hasta donde está dispuesto a llegar».
Por último, también ha confiado en que las empresas ofrezcan una bajada de todos esos costes en el concurso, «Espero libre concurrencia y que las empresas ofrezcan rebajar un 10, un 14 o un 20%», ha señalado.
CRÍTICAS DEL PP
Por su parte, en un comunicado remitido a los medios, el PP ha tachado de «inaceptables e antisociales» las nuevas condiciones del transporte urbano.
«No es de recibo que después de estar todo el mandato de brazos cruzados, ahora el gobierno socialista se saque de la chistera un contrato que regulará este servicio para los próximos 13 años y que supondrá que cada usuario tenga que pagar casi dos euros por un billete, lo que es una barbaridad», ha sostenido el portavoz del PP local, José Antonio Constenla.
El portavoz del PP ha asegurado que, con el nuevo contrato, los usuarios pasarán a pagar más del 70% en un solo billete de autobús y ha censurado que los jubilados tengan que abonar 50 céntimos por traslado una vez superados los 100 viajes.