La Universidade de Santiago de Compostela (USC) creó entre los años 2019 y 2022 un total de 653 plazas de profesorado con el objetivo de renovar el cuadro de personal, así como compensar las bajas, debidas, sobre todo, a jubilaciones forzosas y voluntarias.
Según ha señalado la entidad educativa en un comunicado, el 33 por ciento de los puestos creados a través del Plan de Profesorado 19-22 estaban dirigidos a profesorado ayudante doctor. Estos datos están recogidos en las bases para la elaboración de la Planificación de Personal Docente e Investigador (PDI) 2023, aprobado este martes en el Consello de Goberno.
Así, la USC ha indicado que «se han corregido los desequilibrios existentes entre las diferentes áreas de conocimiento» y que «se ha dotado de profesorado aquellas áreas que tenían que asumir el encargo docente derivado de la implantación de nuevas titulaciones».
En esta línea, ha destacado la entidad, el documento subraya que «más de la mitad de estas plazas» fueron asignadas a áreas de Ciencias Sociales y Jurídicas, que «arrastraban importantes déficits estructurales y son notorias las dificultades para captar profesorado a través de programas de incorporación de personal investigador».
PLAN DE PROFESORADO PARA EL PRÓXIMO CURSO
Por otra parte, en la reunión mantenida este martes se han establecido las líneas generales de actuación que regirán la política de profesorado en el curso 2023-2024, entre las que destaca la reducción de contratos temporales.
De este modo, la universidad pública pretende disminuir el número de profesores interinos que cubren substituciones de larga duración. Además, se suma la voluntad de rebajar la media de edad de profesorado.