Alrededor de 600 mujeres del rural gallego se han reunido en Santiago de Compostela este sábado para celebrar y reivindicar su papel en la sociedad y para pedir «más servicios públicos de calidad», cuya falta las «penaliza» frente al sector masculino.
La jornada, organizada por la Federación de Asociacións de Mulleres Rurais de Galicia con la colaboración de la Diputación de A Coruña, ha contado con la presencia del propio presidente de la institución provincial, Valentín González Formoso; el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; la presidenta de Fademur España, Teresa López; y la de Fademur Galicia, Verónica Marcos; así como con el secretario xeral de Unións Agrarias, Roberto García.
«Estamos aquí, por una parte, para celebrar el papel de la mujer rural en el mundo, y por otra, para denunciar el abandono del rural por parte de la Xunta», ha destacado Formoso, que ha recordado a continuación los «138 colegios menos, el cierre de unidades de atención primaria, declaraciones de la directora xeral del Sergas diciendo que no se puede aspirar a tener un pediatra en cada centro de salud o un servicio de transporte casi desaparecido».
Especial hincapié ha puesto en la falta de relevo generacional en las explotaciones agroganaderas, «casi inexistente». «Menos del 4% de explotaciones están en manos de gente menor de 35 años, lo que anuncia un drama en este ámbito», ha apuntado.
Con todo, ha celebrado que la mujer rural trate de «avanzar, se mueva y busque su papel». «Hay un dato profundamente esperanzador, que cuatro de cada cinco proyectos está promovido por mujeres», ha comentado, instando además a «revertir con ilusión, con inyecciones de los presupuestos» la situación de abandono que viven y «teniendo claro que es un ámbito en el que la igualdad efectiva aún no existe».
«El rural debe ser foco de atención de la Xunta, que debe reforzar la revolución en ordenación territorial para garantizar base territorial a las explotaciones y un mínimo de rentabilidad pública. Hay que reforzar además los servicios públicos en un sector que debe ser la despensa del Estado y que forma parte de la tradición gallega», ha concluido.
ESTATUTO DE LA MUJER RURAL
Por su parte, Verónica Marcos ha centrado su intervención en el nuevo estatuto de la mujer rural, ahora en fase de alegaciones y del que se alegran que se haya creado por fin, aunque no estén de acuerdo en su marco. «Demandamos un estatuto con rango de ley, no incluido en la ley de igualdad», ha apostillado.
La responsable de Fademur en Galicia también ha insistido en la necesidad de servicios públicos «dignos» – colegios, médicos y servicios de atención a los mayores «como hay en la ciudad»–. «El rural penaliza a las mujeres, y esa falta de servicios las penaliza todavía más», ha incidido.
En esa línea también se ha expresado Teresa López, que ha remarcado que las mujeres «quieren seguir viviendo en sus pueblos y aldeas». Además, ha reivindicado «la fuerza de las mujeres y la importancia de la red» (Fademur), que cumple 18 años habiendo conseguido grandes avances, «aunque falta mucho».
«Necesitamos afianzar un mínimo común a nivel estatal, que el empleo de las mujeres sea una realidad en el rural, que los cuidados dejen de condicionar nuestra vida, luchar contra la violencia de género y, sobre todo, participar de verdad donde se toman las decisiones», ha explicado.
A este respecto, ha remarcado que «ahora mismo Europa debate sobre el futuro del rural para que sea próspero y sostenible y, o será con las mujeres, o no lo será». «Por eso es preciso e indispensable que nos escuchen y para eso estamos aquí», ha afirmado.
IGUALDAD Y REPRESENTACIÓN
El responsable de Unións Agrarias se ha unido a la jornada para recordar que «no existe Galicia sin una gestión del territorio, en la que es imprescindible que hombres y mujeres puedan vivir dignamente de la profesión de agricultor».
«La mujer no quiere trabajar en el rural, eso ya lo hace. Lo que quiere es visibilidad e igualdad de condiciones en la representación y, sobre todo, quiere servicios, cuya falta castiga a los trabajos más feminizados; quieren remuneración y reconocimiento», ha destacado, tras lo que ha apuntado que más del 50% de los que trabajan en las explotaciones son mujeres, pero solo alrededor del un 10% ocupa cargos de responsabilidad.
Durante el acto celebrado en el Pazo de Congresos e Exposicións de Santiago se han entregado además cuatro premios a mujeres que han apoyado al sector de la mujer rural, tal y como han explicado las responsables de Fademur: la periodista Aida Pena; la asociación de Pementeiras de Padrón; la jueza Paz Filgueira; y la ganadera y sindicalista María Isabel Liñares.