Los efectos de la sequía cambiarán este año el guión de una de las fiestas populares destacadas en Galicia: la Festa da Auga de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra), que vuelve al origen con los cubos de agua pero se despedirá de las mangueras de Praza de Galicia y en Conde Vallellano.
La concejala de Cultura e Festas, Sonia Outón, explicó que el formato que se presenta este año es «adaptado a las circunstancias» y «más tradicional». En esta edición, los principales protagonistas serán los cubos de agua que tiran los vecinos desde sus balcones dentro de la denominada Zona Húmeda.
La edil ha señalado que esta medida se ha tomado para «reducir el consumo» ante la sequía que afecta al país. Por parte la comisión ‘Auga que non has de beber’ también comparten esa opinión y han remarcado que «la sostenibilidad tiene que estar en concordancia con la fiesta».
Así, la fiesta comenzará sobre las 12,15 horas del martes, 16 de agosto, después de que la imagen de San Roque se traslade desde la iglesia parroquial hasta la capilla y el pregonero lance el primer caldero de agua a la gente.
OTRAS MEDIDAS
Además de las tradicionales mangueras, por parte del Consistorio han anunciado que las fuentes ornamentales también estarán vacías como en ediciones anteriores. Con todo, Outón señala que habrá «fuentes de botón» en la que se podrán rellenar las pistolas de agua, globos u otros objetos utilizados para el «combate cuerpo a cuerpo».
El ayuntamiento y la comisión vecinal han apuntado que estas medidas no van a cambiar la celebración y han asegurado que «la diversión y las mojaduras están garantizadas». También piden «el uso responsable» de la cantidad de agua de la que hagan uso los vecinos.