El alcalde de A Pobra do Brollón (Lugo), José Luís Maceda, explica que el Ayuntamiento evaluará «con tranquilidad» si declarar como zona catastrófica el área arrasada por el incendio en la zona de O Courel, que se convirtió en el más grande de la historia de Galicia con 11.100 hectáreas quemadas, también en los municipios de Folgoso y Quiroga.
Maceda insiste en que «se analizará con tranquilidad, porque ahora mismo no hay mucha prisa y hay que hacer las cosas bien». Así, «una vez hecho este análisis, solicitaremos esa declaración», avanza.
Eso sí, el regidor entiende que A Pobra ya quedaría incluida en esa declaración si la zona catastrófica considera «como un todo» a la Serra do Courel.
Con todo, Maceda recalca que «ahora lo importante es reactivar esta situación del monte frente a los arrastres que se puedan producir ante la posibilidad de tormentas o lluvias». «Para eso están los técnicos estudiando el terreno y ver donde será necesario estabilizar», detalla.
En el término municipal de A Pobra, el alcalde habla de una casa, que servía como segunda vivienda, que fue engullida por las llamas, además de muchos alpendres que no quedaron en pie. Con todo, insiste en que las «mayores pérdidas» del municipio se refieren a la masa forestal y al patrimonio natural.
Además, el regidor confiesa que tiene «esto que se denomina estrés postraumático» de estos incendios, con los que todavía «sueña». «Estamos en esa fase de digerir todo lo que pasó, verlo con otra perspectiva y la verdad es que la conclusión que sacamos es que esto fue un desastre», describe.