Miles de personas disfrutan del Arde Lucus, la fiesta de recreación del pasado romano y castrexo de la ciudad de Lugo, que espera superar el número de visitantes de años anteriores.
La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, ha asegurado que «hay unas ganas de recuperar la normalidad, de recuperar los espacios de socialización que nos arrebató la pandemia» en los dos últimos años.
«Hemos recuperado el esplendor del Arde Lucus en esta 21 edición después de dos años sin celebrarse», ha presumido Méndez después de un primer día donde se ha dejado notar la avalancha de gente a falta de cómo venga el fin de semana.
La regidora ha destacado que este jueves pasado, cuando arrancó la celebración, «la ciudad estaba a tope, con esa ocupación en la hostelería que se ve reflejada en la calle». «Vemos que hay unas ganas enormes de hacer ese viaje en el tiempo», ha resaltado.
Un aspecto que ensalza radica en la «gran afluencia» de público, «mayor que otros años», ha afirmado, en la entrada de las tropas romanas en la ciudad de Lugo desde el barrio de A Ponte en la jornada de este jueves y que suponía el pistoletazo de salida de la fiesta de recreación histórica.
Sobre este fin de semana, la alcaldesa de Lugo vaticina que se puede rebasar la «cifra de años anteriores a la pandemia por esas ganas de disfrutar del Arde Lucus y de disfrutar de la calle». «El tiempo va a acompañar y ya se ve mucha gente por la calle y en los campamentos», ha comentado, en los 19 que se extienden por la ciudad y que se corresponden con las asociaciones que promueven esta fiesta, con más de 400 actividades hasta el domingo.
El Ayuntamiento se volcará, ha trasladado Méndez, en conseguir que el Arde Lucus sea declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, una celebración que alcanza ya el cien por cien de ocupación hotelera en la ciudad de las murallas.