Los ayuntamientos del conocido como ‘triángulo mágico’ del Entroido, el carnaval gallego, han decidido suspender los grandes eventos de estas fechas ante la situación epidemiológica, pero se mantienen otros espectáculos como desfiles. Así, un año más, Galicia no podrá contar con la fiesta de Comadres en Verín, el ‘Farileiro’ –fiesta en la que se lanza harina– en Xinzo y la ‘Morena’ en Laza.
La decisión se tomó de forma conjunta en la sala de plenos del Ayuntamiento de Xinzo de Limia, que albergó este martes una reunión de los alcaldes de Verín, Laza, Xinzo, y además, Vilariño de Conso y Viana do Bolo.
El acuerdo fue unánime, de forma que solo habrá charangas y disfraces individuales por las calles, de forma que se puedan evitar las aglomeraciones. Así, se han excluido también orquestas y conciertos, así como eventos programados.
La reunión, que tenía como objetivo salvar la celebración de la fiesta declarada de interés turístico nacional, pero respetando medidas sanitarias, ha sido calificada por el teniente alcalde de Verín, Diego Lourenzo, de «reunión histórica».
Así, han coincidido en la necesidad de «asentar los mismos criterios porque no tendría sentido programar de maneras distintas» en cada uno de los territorios del ‘triángulo mágico’.
LAZA
En Laza, el alcalde, José Ramón Barreal, ha trasladado que no habrá foliones ni tampoco lunes borralleiro y tampoco la bajada de la Morena. «Será una fiesta más de calle, evitando aglomeraciones, un Entroido más local», ha apuntado.
Sí se mantendrá lo más característico de este Entroido ourensano, los peliqueiros. «Eso no podía faltar», han dicho.
Con todo, el alcalde indica que «no hay autoridad jurídica ni legal» para prohibir a nadie salir a la calle a celebrar estos actos, por ello pide «responsabilidad ciudadana y sentido común», cosas que asegura, «en Laza hay de sobra». «No vamos a tener ningún problema, todo el mundo se va a poder disfrazar y respetar las normas», ha señalado.
VERÍN
Una situación similar la que vive el Ayuntamiento de Verín, saldrán los cigarrones porque «sin ellos no sería ni Entroido ni nada», dice el teniente alcalde, pero por el momento aún no avanzan cuál será el programa de actividades que habrá. Sí adelanta que «hay Jueves de Comadres, no el típico, pero si Comadres».
Aclara con ello que «sin bajada del Camino Real para evitar aglomeraciones pero la gente podrá acudir igual a sus cenas, a la hostelería». «Los cigarrones y comadres son esencia de este Entroido, no puede ser de otra manera», dice Diego Lourenzo.
«Será un Entroido local y diferente, la gente iba a salir a la calle, esta es una fiesta de los vecinos, hubo mucho debate sobre si Entroido sí o Entroido no, y sí pero con prudencia», señala.
XINZO DE LIMIA
En Xinzo de Limia la valoración se repite. El protocolo no afecta a las decisiones que ya habían tomado los tres ayuntamientos por lo que mantendrán lo que ya habían acordado: no habrá harina en el domingo fareleiro y tampoco petardazo, pero se respetarán los días de celebración.
«Abogamos por un Entroido de transición», dice la regidora, Elvira Lama. «Celebremos de día para que no haya incidencias de noche», ha pedido, igualmente, con respecto a que el protocolo de la Xunta permite un «horario un poco más flexible para la hostelería, un sector muy dañado».
Queda por saber las decisiones que asumen Viana do Bolo, Vilariño de Conso y Manzaneda, que mantendrán una segunda reunión este jueves para hablar de un Entroido que consideran «más rural».
PROTOCOLO DE LA XUNTA
El protocolo de la Xunta de Galicia sí permite los desfiles y los bailes siempre que cada uno de los ayuntamientos adopte todas las medidas necesarias para garantizar el uso correcto de los espacios en los que se desarrollen. Además, es obligatorio que se respete la distancia de seguridad entre personas y el uso de mascarillas en todo momento, tanto para participantes como para público.
Asimismo, en el protocolo se específica la prohibición de fumar aunque sea en espacio público y la obligación de presentar los certificados covid para acceder a espacios cerrados con más de 200 personas.
El regidor de Laza, José Barreal ha sido el más crítico con el documento, al apuntar que «no ha sido más que un brindis al sol», porque «es muy fácil decir que cada ayuntamiento vigile las aglomeraciones, pero no es tan fácil de cumplir». De ahí la decisión de no convocar los eventos típicos que en el Ayuntamiento, que «suponían grandes masificaciones».
Todos afirman que «ha sido más laxo» que las decisiones que se han marcado a sí mismos los ayuntamientos, por lo que coinciden en que «navegan en la dirección correcta».