El alcalde de Ribas de Sil, Miguel Ángel Sotuela, ha lamentado la «desgracia» que, a su juicio, ha supuesto el incendio declarado en la parroquia de Nogueira, que ya ha sido extinguido, para la Ribeira Sacra y ha constatado que ha dejado daños «cuantiosos».
En concreto, se trata de un fuego ya registrado el pasado 5 de septiembre en la parroquia de Nogueira y que fue extinguido sobre las 21,00 horas de este sábado. A este respecto, el regidor se ha mostrado convencido que el fuego, que se llevó por delante 140 hectáreas, fue «provocado».
Sotuela ha concedido que se trata de una «desgracia», con «un montón de monte quemado». «Y nos parece que por los focos cuando empezó todo esto que (el incendio declarado en Nogueira y el originado en la parroquia de Ribas de Sil, que arrasó 1.600 hectáreas,) son intencionados, aunque habrá que esperar a que se investigue todo esto», ha afirmado.
El alcalde de Ribas de Sil ha puesto de manifiesto, con respecto al gran incendio en A Ribeira Sacra, que «es todo el mismo, la misma noche y el mismo día», por lo que ha considerado que «está todo vinculado». «Era un día de perros, andaba mucho aire y llevó el fuego a todas partes», ha descrito.
En cuanto a los daños en la parroquia de Nogueira, ha constatado que son «cuantiosos» debido a que se trata de «una zona donde hay mucha masa forestal que fue quemada». «Es una zona de pinos muy grande. Algunas zonas estaban recién repobladas y en otras se estaba quitando madera. Afectó a tres o cuatro comunidades de montes», ha certificado finalmente Miguel Ángel Sotuela.