El investigador Federico Martinón, coordinador de la unidad de investigación en vacunas y ensayos clínicos pediátricos del Instituto de Investigación Sanitaria y jefe de Pediatría del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS), ha querido lanzar un mensaje de «tranquilidad» a toda la población y ha afirmado que la evidencia científica avala que todas las vacunas que están comercializadas contra la covid-19 en España son «seguras».
En declaraciones a los medios este miércoles, después de que la comisión de salud pública decidiese apostar por Pfizer para inocular las segundas dosis de la pauta vacunal a los menores de 60 años que cuentan con una primera de Astrazeneca, Martinón ha vuelto a defender su postura de mantener la misma fórmula británica para estas personas, puesto que la ficha técnica de la vacuna y la Agencia Europea del Medicamento (EMA) así lo avala.
En este sentido, el investigador ha reconocido que «no ayudan» al proceso de vacunación las «idas y venidas» de los criterios que se lanzan, ahora también dejando que los ciudadanos tengan la posibilidad de escoger la vacuna en el caso de haber recibido la primera dosis de Astrazeneca (esto todavía sin cerrar).
«Lo primero que tenemos que saber es que las vacunas que estamos usando son seguras y funcionan muy bien. Ese es el verdadero titular», ha manifestado Martinón, quien ha indicado que, además, hay datos «recientes» de la eficacia de las inyecciones puestas a la población que demuestran que «funcionan» para prevenir la mortalidad y los ingresos en UCI, con una disminución «prácticamente del 100 por cien».
A juicio de Martinón, los mensajes de idas y venidas «lo que hacen es retrasar la vacunación» en un momento en que «lo importante es vacunar cuanto antes al mayor número de personas». «Esa es la verdadera prioridad y en la que tendríamos que estar todos de acuerdo», ha indicado, antes de añadir que «no hay datos objetivos a día de hoy que permitan decir que una vacuna es mejor que otra».
Además, ha recordado que las informaciones científicas oficiales permiten «el uso de estas vacunas sin limitaciones de edades ni contraindicaciones más allá de las alergias».
DECISIONES DE LAS COMUNIDADES
Dicho esto, ha convenido que hay decisiones técnicas en las que se «tienen en cuenta otros factores» que él no es «capaz de explicar o rebatir», porque las autoridades «tienen su papel y su responsabilidad». Pero desde el punto de vista científico, «las vacunas son seguras, funcionan en el mundo real y no hay datos objetivos de que unas son mejores que otras», ha aseverado.
Martinón ha comprendido que «es normal» que la gente «tenga dudas» ante las diferentes informaciones, pero ha insistido en enviar un mensaje de «tranquilidad».
Para él, lo «más sencillo es completar la pauta vacunal con la vacuna con la que se inició». «Pero si la decisión es otra, tampoco supone un riesgo importante, no debería ser un problema», ha manifestado para, aseverar, a renglón seguido, que desde el punto de vista científico «lo lógico y sencillo» sería administrar la segunda dosis de Astrazeneca.
Al respecto, ha indicado que «de lo que hay más datos» es, precisamente, de la pauta vacunal completa con la misma vacuna. Además, ha apuntado que «no hay datos nuevos que hagan pensar que hay que cambiar esta recomendación».
«Si de mí dependiese, repito, haría lo que recomienda la EMA y la OMS, completar la pauta vacunal (con Astrazeneca), que es lo más fácil, sencillo y de lo que hay más datos de seguridad y eficacia. ¿Para qué complicar algo que ya es suficientemente complejo?», ha expuesto, si bien ha matizado que la decisión de las comunidades autónomas «es soberana y hay que acatarla».
Martinón ha reconocido que existen alternativas y se pueden hacer las cosas de «otra manera», pero ha apostado por «tener ideas estables para que la gente no esté confundida», puesto que ya «tiene bastantes preocupaciones».
Lo que considera que «no es bueno desde el punto de vista de la confianza y unidad del Estado» es que haya decisiones diferentes al respecto de la inoculación de las segundas dosis para menores de 60 años. «Pero al final, las comunidades tienen soberanía para hacerlo, yo no tengo capacidad para que se modifique», ha apostillado.