Los 26 municipios pontevedreses y portugueses del Agrupamento Europeo de Cooperación Territorial (AECT) Río Miño han convocado para este lunes una nueva reunión con carácter urgente para analizar lo que clasifican de «total y persistente desconocimiento» de los Gobiernos centrales de Madrid y Lisboa sobre la realidad del territorio fronterizo del Miño, el de mayor circulación de toda la frontera ibérica.
La intención del encuentro, según apunta el vicedirector, Uxío Benítez, en un comunicado difundido por la Diputación de Pontevedra, es «avanzar con nuevas acciones de protesta en pro de la defensa de los intereses de los trabajadores transfronterizos y de transportes de mercancías, así como de las muchas empresas afectadas» por las «insuficientes» medidas de apertura de la frontera.
Este encuentro entre los alcaldes del AECT Río Miño surge tras publicación del despacho por el Ministerio de la Administración Interna del Gobierno de Portugal que mantiene el Puente Internacional de Tui-Valença como el único punto de paso autorizado durante 24 horas, con la novedad de la apertura parcial de la ponte Arbo-Melgaço, tres horas por la mañana y tres horas por la tarde, ampliando ese mismo horario parcial en Salvaterra-Monção.
Los mandatarios de ambas márgenes del río Miño asumen de manera unánime las dificultades fruto de la pandemia Covid-19 y la necesidad de una actuación eficaz para su combate, pero subrayan que la apertura de todos los pasos «en nada contradice el objetivo de salvaguardar la salud pública».
«Este cambio en los pasos autorizados por el despacho es ‘lanzar arena a los ojos’ de los alcaldes y alcaldesas y de sus vecinos, pues no satisface en absoluto las pretensiones anteriormente expuestas», subraya Benítez, que añade que sólo se pretende facilitar el tránsito a las personas autorizadas.
«NO HAY RAZONES OBJETIVAS»
Benítez ha remarcado que «no hay razones objetivas para no abrir todos los pasos, sino sólo razones cicateras que toman gobiernos desde la lejanía y sin conocimiento», por lo que ha pedido un «esfuerzo superior» a Madrid y la Lisboa «tanto en comprensión de la realidad de la frontera miñota cómo a la hora de dotar de medios los controles de los puntos de pasaje autorizado».
A modo de ejemplo, ha recordado que el puente de Tomiño-Vila Nova de Cerveira –que por ahora permanecerá cerrado tras los últimos cambios– es el quinto con más movimiento de vehículos de los 64 de toda la raya entre España y Portugal.