La Xunta de Galicia ha sacado a licitación la redacción del proyecto básico para construir una nueva planta de compostaje en el ayuntamiento de Vilanova de Arousa (Pontevedra).
Así lo ha anunciado este miércoles la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, durante una visita al polígono industrial de Baión, en el que se ubicará la futura planta.
Según ha detallado la titular de Medio Ambiente, la nueva planta de biorresiduos se ha licitado por un importe de 157.000 euros, IVA incluido. El objetivo de la nueva infraestructura proyectada en Vilanova es dar servicio a 25 ayuntamientos del eje atlántico sur, por lo que Ángeles Vázquez subrayó que los beneficios de su puesta en marcha se percibirán en el municipio en el que se ubicará la planta «pero también en toda la comarca del Salnés».
En este sentido, la previsión es que estas instalaciones den empleo directo en la zona la entre 8 y 10 personas, a las que se sumarán alrededor de otros 20 empleos inducidos.
Los terrenos que albergarán las nueva plata de compostaje suman una superficie de 20.000 metros cuadrados y fueron adquiridos por la Xunta por un importe de 1,5 millones de euros.
COMPOST DE ALTA CALIDAD
La de Vilanova de Arousa será la segunda planta en Galicia dedicada al tratamiento y gestión de biorresiduos domésticos, tras la puesta en marcha el año pasado de la de Cerceda, en el propio complejo medioambiental de Sogama.
En cuanto a la capacidad de la planta arousana, la conselleira indicó que podrá tratar hasta 15.000 toneladas al año de fracción orgánica de residuos domésticos y otras 7.000 toneladas de podas y restos de madera.Según ha detallado Ángeles Vázquez, el objetivo es, con todo este material, alcanzar una producción de 6.000 toneladas anuales de compost de alta calidad, que se destinará al sector de la agricultura como abono natural y sostenible en sustitución de los fertilizantes artificiales.
LA TOTALIDAD DEL PROCESO
La planta de Vilanova de Arousa abarcará la totalidad del proceso del compostaje de los residuos recibidos, comprendiendo todas las fases (pretratamiento, fermentación, maduración y almacenamiento), así como los correspondientes tratamientos de aire y de aguas.
Todo el proceso se llevará a cabo en naves cerradas, haciendo uso en todo momento de las últimas tecnologías de encausado, control de olores y ruido, y la operativa industrial de la instalación se alimentará con energía renovable. Fundamentalmente, a través de paneles solares.
MÁS DE 15 MILLONES DE INVERSIÓN
En total, la inversión prevista por la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda en la puesta en marcha de la instalación proyectada en el polígono de Baión ascenderá a 15,5 millones de euros.
La conselleira recordó que, además de la planta arousana, está previsto construir otras dos plantas en el sur de Ourense y en el norte de Lugo, con el fin de poder ofrecer el mismo servicio en estas dos provincias y cubrir la totalidad de la comunidad gallega.
PRESUPUESTOS 2021
Tras incidir en que una de las prioridades de los presupuestos de su departamento para 2021 será «seguir avanzando hacia un modelo moderno y eficaz en la gestión de los residuos que sitúe a Galicia a la vanguardia de Europa» en esta materia, Ángeles Vázquez ha remarcado que la Xunta dedicará 31,4 millones de euros procedentes de los fondos europeos REACT solo la este capítulo.
De esta partida global, 5 millones irán dirigidos a transformar las cinco microplantas de transferencia con las que cuenta actualmente Sogama –localizadas en Ponteceso, Curtis, Riotorto, A Lama y A Cañiza– en instalaciones más eficientes y con mayor capacidad, aumentando las tasas de reciclaje y reduciendo las emisiones de CO2.
Otros 25 millones se dedicarán a fomentar el compostaje en la comunidad a través de las tres nuevas plantas de biorresiduos proyectadas en las provincias de Pontevedra, Ourense y Lugo.
Ángeles Vázquez considera que, gracias a estas inversiones, Galicia podrá «seguir optimizando y consolidando la eficiencia de su actual modelo de gestión de recogida selectiva de los residuos», en cumplimiento de las directrices europeas, al tiempo que contribuirán a «crear nuevos empleos verdes» en diferentes sectores profesionales.