La Xunta, a través del Servizo de Gardacostas de Galicia, ha desactivado el Plan Territorial de Contaminación Marina Accidental de Galicia (Plan Camgal) tras constatar la ausencia de contaminación en la zona en la que la semana pasada apareció una mancha de fuel en las cercanías de la ría de Arousa, fuera de la costa, entre Ribeira y la Illa da Rúa.
La Xunta tomó esta decisión una vez que el seguimiento realizado en los últimos días por distintas embarcaciones del Servicio de Gardacostas y medios de Salvamento Marítimo del Estado finalizase sin encontrar ningún resto de fuel ni nuevas manchas en la zona. Previamente, el Gobierno central ya había desactivado el Plan Marítimo Nacional.
Los medios de la Xunta que permanecieron en alerta en las últimas jornadas fueron el buque Irmáns García Nodal y las patrulleras Punta Falcoeiro y Punta Roncadoira. Su trabajo dio continuidad a la labor realizada la semana pasada, en coordinación con Salvamento Marítimo del Estado, para contener y eliminar la mancha de fuel y que contó con la participación tanto personal del Servicio de Gardacostas como del Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar), que realizó un seguimiento de la mancha mediante boyas durante todo el operativo. A ellos se sumaron también drones de la Axencia Galega de Emerxencias para la inspección del área afectada.
El operativo en la zona fue seguido desde el primer momento por el subdirector xeral del Servizo de Gardacostas, Lino Sexto, mientras que el Intecmar cerró de manera cautelar el único polígono de bateas que estaba abierto en la zona, el Ribeira B, cierre que fue levantado el pasado viernes dado que la mancha finalmente no se acercó al entorno de las bateas.