«La única certeza en este momento es que el Año Santo se abrirá el 31 de diciembre». Así se ha pronunciado el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, sobre la posibilidad de ampliar el Xacobeo 2021 de cara a amortiguar el impacto de la pandemia en un evento eclesiástico que lleva más de una década sin tener lugar.
A preguntas de los periodistas en la rueda de prensa de presentación de un estudio de impacto económico de la diócesis compostelana elaborado por la USC, Julián Barrio ha evitado concretar si solicitará a la Santa Sede prorrogar el cierre de la puerta santa de la Catedral compostelana.
«Este tema va más allá de lo que se pueda desear o querer», ha comentado el arzobispo, que ha apelado a conocer la evolución de la situación asociada a la pandemia de coronavirus. «Vamos a ver cómo evoluciona y en función de esto actuaremos», ha apostillado.
En este sentido, ha incidido en que la decisión de ampliar la duración del Año Santo no está en manos del Arzobispado, sino que ha de ser el papa Francisco I quien dé el visto bueno a una hipotética petición que debe proceder de la propia diócesis.
En todo caso, Julián Barrio ha subrayado que no existe debate en torno a la fecha de inicio de la celebración religiosa, que arranca con la apertura de la puerta santa el 31 de diciembre previo al año en el que el 25 de julio cae a domingo.
«El Año Santo no es un evento más. Un congreso se puede posponer, el Año Santo no», ha aseverado ante las «voces» que, dice, han planteado un posible retraso de la apertura de la puerta santa para esquivar los meses de restricciones a la movilidad que se avecinan hasta que exista vacuna.
AYUNTAMIENTO DE SANTIAGO
Por otra parte, también este miércoles, el teniente de alcalde del Ayutamiento de Santiago, Gumersindo Guinarte, ha señalado que el consistorio trabaja con la hipótesis de que la situación asociada a la pandemia mejore hacia el verano de 2021 y se recupere la demanda turística en el año de celebración del Xacobeo.
«Confiamos que de cara al verano, en el segundo trimestre, empiece a recuperarse la demanda turística. Vamos a trabajar para que en la segunda mitad del año se produzca un fuerte incremento de la demanda», ha incidido Guinarte, que reconoce que las previsiones son negativas para el principio del año salvo «una sorpresa que sería agradable, pero muy improbable».
De este modo, con la confianza en que la llegada de una vacuna para la covid-19 traiga la recuperación de la movilidad en un contexto de seguridad sanitaria, el ayuntamiento compostelano espera que en la segunda mitad del año se recupere el sector turístico y hostelero de la capital gallega.
Hasta entonces, Guinarte ha apuntado que el ayuntamiento estudia la posibilidad de ampliar la moratoria en el pago de determinadas tasas, como recogida de basuras o terrazas, a los establecimientos hosteleros de la sociedad.
Con todo, de cara a evitar cierres masivos por la caída del número de visitantes en la ciudad, el gobierno santiagués demanda la implicación del resto de administraciones, puesto que sus recursos «son limitados» y «por sí mismo no puede mantener a flote» a los negocios en los que la pandemia está teniendo mayor impacto.