«Hay investigadores a punto de jubilarse que siguen con contratos concatenados, sin un contrato indefinido, sin estabilidad». Esa es la denuncia que han realizado este miércoles los representantes de los trabajadores de las tres fundaciones de investigación sanitaria de Galicia, que han acusado a la Xunta de «no asumir ni el más ínfimo compromiso con este sector».
Durante una rueda de prensa en la que han participado varios investigadores, Ezequiel Álvarez, en representación de la Fundación Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) de Santiago, ha lamentado las condiciones laborales en las que este colectivo desarrolla su trabajo, de forma «precaria», sin «estabilidad laboral» y dependiendo en buena parte de los fondos que ellos son capaces de captar.
A pesar de que la sociedad asume que la investigación sanitaria es una «actividad fundamental», los fondos y las condiciones que se destinan a este sector no son capaces de «retener talento» o dar «condiciones dignas» a sus trabajadores.
«La investigación no merece este castigo», ha dicho Ezequiel Álvarez, que ha puesto de relevancia «lo mucho que se hace» en estas fundaciones de investigación «en las malas condiciones en las que se hace». Además, en la situación actual de investigación contra la COVID-19, ha lamentado que los profesionales gallegos deban «competir en una liga mundial con estos mimbres».
CONVENIO
Los representantes de los trabajadores de las fundaciones de investigación sanitaria –el Idis de Santiago, la Fundación Profesor Novoa Santos de A Coruña y la Fundación Biomédica Galicia Sur de Vigo– negocian desde hace un año un convenio que les dé mejores condiciones laborales.
Dentro de este convenio, apuntan, la estabilidad es «algo fundamental» a lo que, ha asegurado Ezequiel Álvarez, «se niega» la Xunta. Además, lamenta, el convenio que se propone «deja a parte del personal fuera», esto es, a los que «ganan financiación propia para su proyecto». Finalmente, critican que, en un año de negociaciones, «aún no se tenga una propuesta salarial».
Estas son las tres cuestiones pendientes, y «fundamentales», para las que los investigadores sanitarios afirman no tener aún una propuesta, por lo que avanzan que seguirán «peleando» por mejorar sus «precarias» condiciones.
De hecho, explican, la situación de «prórroga sucesiva de contratos temporales» a la que se ven abocados algunos profesionales constituye un «fraude de ley», ante lo que están «obligados a la denuncia judicial».