El abogado de la familia Franco, Luis Felipe Utrera Molina, ha defendido que sus clientes pueden poner a la venta «cualquier propiedad que sea suya», al ser preguntado, antes del inicio del juicio sobre la devolución al Estado del Pazo de Meirás, por la Casa Cornide, de A Coruña.
«Han declarado los impuestos de la herencia de su madre y pueden poner a la venta cualquier inmueble de su propiedad», ha recalcado después de que la Casa Cornide, sobre la que se reclama su devolución al patrimonio público, apareciese puesta a la venta en un portal inmobiliario.
Mientras, sobre el juicio sobre el Pazo de Meirás, ha insistido en que se centra «en una discusión sobre el derecho de la propiedad» frente a los argumentos del Estado que lo reclama como un «bien público» y que alega que hubo una «venta simulada» a Franco en 1941.
De la vista, ha dicho que lamenta «que por parte del Estado hay una tentación de intentar politizar un asunto que es meramente jurídico». «No se trata de decidir si Franco era bueno, malo o regular».
Y es que el letrado ha manifestado que aún «en el hipotético caso que el Estado lo hubiera adquirido en el 1938», ha expuesto en relación a la compra de la Junta pro Devolución a los herederos de Emilia Pardo Bazán, documento que centra la demanda de la Abogacía del Estado– sus clientes son los «dueños».
«Por la posesión pacífica como dueños desde 1975, asumiendo costes de la obra, la reconstruccion en el incendio y en ese momento el Estado no se acordó que no era suyo porque sabía que no era suyo», ha añadido.