El secretario provincial del PSOE de Ourense y concejal municipal, Rafael Rodríguez Villarino, ha culpado este viernes al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, como el «máximo responsable» de que el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, «lleve un año gobernando la ciudad sin hacer nada y engañando a la ciudadanía».

Así lo ha manifestado durante una rueda de prensa celebrada este viernes con el objetivo de valorar el primer año de gobierno de Gonzalo Pérez Jácome al frente del Ayuntamiento de Ourense. En su comparecencia, le han acompañado los concejales socialistas Natalia González y Xosé Rúas.

En esta situación, Rodríguez Villarino le ha pedido a la ciudadanía que «tenga en cuenta la letalidad de Jácome para Ourense» a la hora de votar en las próximas elecciones autonómicas del día 12 de julio. Para ello, ha recordado a los vecinos que «fue Alberto Núñez Feijóo el que dio el visto bueno para que Jácome gobernara en la ciudad».

Con ello, le ha solicitado a los ourensanos que «se posicionen en las elecciones gallegas» en contra de «un régimen en declive, corrupto y permanentemente lleno de clientelismo y estafas a la ciudadanía».

RECLAMAN UN MODELO DE CIUDAD

En su intervención, Natalia González ha hecho un análisis pormenorizado de los motivos que han conducido al PSOE ourensano a afirmar que «el gobierno bipartito de PP y DO no tiene un modelo de ciudad» cuando se cumple un año de su llegada al poder.

En clave urbanística, ha criticado que un documento como el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), que «marcará el futuro de la ciudad», se encuentre «paralizado» en «negociaciones únicamente políticas que no tienen en cuenta en ningún momento los intereses de la ciudadanía».

Con respecto al AVE, la edil socialista ha acusado al gobierno municipal de «renunciar definitivamente a conseguir el mejor proyecto de estación intermodal». Así, ha señalado que «en los próximos días caducará el convenio marco en el que el PP dio el cambiazo a la anterior intermodal, pero el gobierno municipal no apuesta por cambiar las cosas y hacer un nuevo convenio».

Otro «tema clave» para los socialistas es el Plan de Movilidad que desde el partido sostienen «haber apoyado desde el minuto uno» y en el que ahora solo dicen ver «un instrumento para obtener rédito político y dejar fuera a los restantes grupos municipales».

«A día de hoy es inaudito que no se encuentre en marcha ya la circulación en la ciudad a 30 km/h y que tampoco se haya apostado por la peatonalización o el uso de la bicicleta como medio de transporte alternativo en esta nueva normalidad», ha señalado Natalia González.

En cuanto al plan de obras, como grupo de la oposición han pedido «rigurosidad», porque entienden que «el dinero público hay que emplearlo en obras» pero sostienen que «éstas no deben responder al capricho personal de Jácome, en lugar de a mejorar la realidad de los vecinos de Ourense».

«El plan de obras no atiende las peticiones de los vecinos, sino que ahora mismo lo que hay es el plan de rampas y escaleras mecánicas de Pérez Jácome», ha aludido la edil socialista. En este contexto, también han exigido que «se lleve a cabo un estudio de viabilidad de esas obras y también sobre los costes de mantenimiento» porque, de lo contrario, «se hipotecará a la ciudad».

UNA CIUDAD «SUCIA» Y «ABANDONADA»

En el apartado de limpieza y medio ambiente han denunciado una ciudad «sucia, abandonada y llena de maleza» y han dicho «seguir esperando por la puesta en valor de Montealegre, la recuperación del vivero municipal y la conservación de los paseos del río».

Natalia González ha criticado que «el gran eje de gestión del gobierno municipal en el último año ha sido la colocación de personas afines en nómina, dando la espalda a los ciudadanos y culpabilizando a los funcionarios».

«El gobierno de Jácome lleva un año engañando a la ciudadanía con el apoyo del PP y del señor Alberto Núñez Feijóo, al que no le importó colocar al frente de la ciudad a un alcalde letal con tal de garantizar los votos que necesita para el próximo 12 de julio», ha manifestado Xosé Rúas.