El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, ha anunciado este lunes que entre las funciones de su personal eventual se incluye la de convertirse en «guardianes del tiempo» para vigilar que «se cumplan los microplazos de cada procedimiento burocrático» y «aplicar expedientes por bajo rendimiento a los funcionarios que se extralimiten en las fechas».
El regidor ha subrayado que «será estricto con plazos límite» porque en el Ayuntamiento de Ourense «las máquinas se atascan constantemente», según ha señalado de manera figurada, y «tiene que haber personas que salgan al rescate».
«Del mismo modo que si alguien comete una infracción de tráfico tiene que haber unos captadores, bien sean unos policías o unas cámaras, haciendo esa misma analogía en el Ayuntamiento de Ourense, cuando un plazo no se cumple tiene que haber personas que digan lo que falló y ayuden a desatascarlo buscando responsables o lo que haga falta», ha señalado.
Con la creación de la figura de los «guardianes del tiempo», Gonzalo Pérez Jácome aguarda que «todo fluya» para hacer frente al problema de la «herencia de descoordinación y parálisis de los últimos 10 años en el Ayuntamiento de Ourense».
El alcalde ha comparado las dependencias municipales con una fábrica de la que «en vez de salir 100 coches al día lo hacen tres», pero se ha mostrado optimista al señalar que «esto se está solucionando poco a poco».
TREN HOTEL
Por otra parte, el regidor municipal también ha mostrado su desacuerdo este lunes «ante la decisión del Gobierno central y Renfe» de suprimir el servicio del tren hotel Rías Gallegas a Madrid.
«Un trayecto emblemático para todos los gallegos pero, en especial para los ourensanos, gracias al que cobraba sentido que la estación de Ourense tuviese por nombre Empalme», ha explicado Gonzalo Pérez Jácome.
Ante esta situación, el alcalde ha valorado que «el Estado está haciendo una discriminación negativa» con la ciudad de As Burgas porque «no solo no le da más servicios, sino que le quita los pocos que ya tenía», ha apostillado.
«El tren nocturno convertía a Ourense en la estación central porque los ferrocarriles que venían de A Coruña, Rías Baixas y Rías Altas se unían aquí para emprender el trayecto hacia Madrid», ha explicado. En este contexto, ha hecho un llamamiento para «evitar» esta situación que «supondría el fin de la estación Empalme».