El líder del PP, Pablo Casado, ha minimizado este lunes que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, esconda las siglas del Partido Popular en la cartelería electoral para los comicios del 5 de abril y ha subrayado que en una campaña electoral la «estética es lo de menos». «Feijóo es cien por cien PP. Lo dijo ayer», ha proclamado.
Casado ha afirmado que lo que dice el presidente de la Xunta es «muy parecido a lo que dice Isabel Díaz Ayuso», presidenta de la Comunidad de Madrid, en materia de impuestos, educación, sanidad o infraestructuras, aunque luego en campaña cada uno pueda «darle un acento o una imagen» en la que sus ciudadanos puedan sentirse más identificados.
Según ha dicho, en Galicia han dado con la «clave» de evitar que haya un «nacionalismo de derechas» y ha agregado que eso lo consiguió Manuel Fraga con ese «galleguismo constitucional y cordial». «Nadie dudaba de que Fraga, como padre de la Constitución, creía en España pero era compatible de tener un sentimiento de identidad compartida y abierta de Galicia que tiene muchos rasgos que a la gente le gusta destacar como una lengua que integra, no separa, y una cultura que suma, no que resta», ha apostillado.
Un día después del mitin celebrado en Ourense con Feijóo y Mariano Rajoy, Casado ha afirmado que él hizo un balance de lo que ha hecho el presidente de la Xunta en estos 11 años de mandato pero también de lo que hizo el expresidente del Gobierno durante sus siete años en Moncloa porque «la gente no se acuerda» de lo que hicieron y lo ha achacado a que el PSOE «miente mucho». «España es de los pocos países en que la mentira no tiene un coste electoral», se ha quejado en Telecinco.
JUSTIFICA LA DECISIÓN SOBRE ALFONSO ALONSO
Una semana después de apartar a Alfonso Alonso como candidato a lehendakari, al ser preguntado si es responsable de ese cese, Casado ha respondido que él es responsable de cumplir su «mandato» con los afiliados que le votaron en primarias y que consistía en «volver a reconstruir el espacio constitucionalista para enfrentarse a la izquierda».
Casado ha señalado que ese compromiso, que después «validaron» meses después en la Convención Nacional celebrada en enero del año pasado, hace que para el PP sea «fundamental» que puedan ir juntos PP y Cs en autonomías como País Vasco y Cataluña, en las que el nacionalismo y la izquierda «ya están haciendo un cordón sanitario al constitucionalismo».
En el caso de Galicia, ha indicado que el constitucionalismo «ya está aglutinado en torno al PP», dado que tiene un 40 por ciento de voto, pero en Cataluña y País Vasco los restos a otros partidos pueden impedir la mayoría a los nacionalistas. A su entender, no pueden repetir lo que paso en las generales de abril y noviembre, porque el centro-derecha sacó mas votos pero la «fragmentación penalizó el reparto de escaños».
«No podemos esperar una tercera vez», ha proclamado, para añadir que la gente está «harta» de los «cálculos políticos y de las sopas de letras» y que lo que quiere es que el centro-derecha se ponga de acuerdo para poder echar a Pedro Sánchez del Palacio de la Moncloa.
AFEA A VOX NO CREER EN LA UE NI EN ESTADO AUTONÓMICO
En cuanto a la irrupción de Vox, el presidente de los ‘populares’ ha dicho que él no se dirige a la estructura del partido que dirige Santigo Abascal sino a sus votantes porque hay «muchos votantes» de ese partido, «la mayoría», que «en alguna ocasión ha votado al Partido Popular».
«Por tanto, me tengo que dirigir a esos votantes para decirles que respeto totalmente su decisión de voto pero les vuelvo a tender la mano para decir que ésta sigue siendo su casa y pueden volver al partido al que votaron. Y con el aliciente de que lo estamos haciendo lo que tenemos que hacer, ampliar el espacio electoral que está a la derecha del PSOE e incluso albergando a aquellos votantes socialistas a los que les avergüenzan los pactos de su secretario general con los independentistas y con los comunistas», ha manifestado.
Dicho esto, el PP se ha presentado como la fuerza «tranquila y moderada», así como «la centralidad» dado que, según ha dicho, su formación defiende «políticas transversales». Por el contrario, ha dicho que Vox «no quiere la UE» ni defiende el Estado Autonómico que en este momento ejerce de «contrapeso contra Sánchez» y a su «mal gobierno».