El adelanto de las elecciones autonómicas en Galicia y el País Vasco ha pillado a Vox inmerso en la organización de su Asamblea General y con una débil estructura territorial. Sin embargo, el partido está decidido a concurrir a las urnas en solitario en ambas comunidades y tendrá que elegir próximamente a sus candidatos, según han explicado a Europa Press fuentes de la formación política.
La fecha del 5 de abril para los comicios vascos y gallegos va a obligar a todos los partidos a precipitar el proceso de designación de sus cabezas de lista, posibles alianzas y composición de las candidaturas.
Pero en el caso de Vox, el calendario electoral coincide además de pleno con la celebración de su Asamblea General, convocada para el día 7 de marzo con la renovación del Comité Ejecutivo Nacional, el máximo órgano de dirección del partido, en el orden del día.
En cualquier caso, la decisión de presentarse en ambas circunscripciones está tomada y además lo hará en solitario, sin formar parte de posibles acuerdos a los que pudieran llegar PP, Ciudadanos y otras organizaciones sociales.
Abascal ya descartó de plano la pasada semana la posibilidad de formar parte de estas coaliciones y reconoció que ni siquiera habían contado con ellos en los primeros pasos de lo que inicialmente se llamó ‘España Suma’.
MODESTOS RESULTADOS EN LAS URNAS
Actualmente Vox no tiene representación autonómica ni en el País Vasco ni en Galicia. Además, sus resultados en ambos territorios fueron muy modestos en todas las citas con las urnas de 2019, que por otro lado auparon al partido a la primera línea política en el resto de España.
Sin embargo, Abascal se mostró convencido de tener mejor suerte en esta ocasión y conseguir entrar por primera vez en sus parlamentos autonómicos, igual que en el Parlamento de Cataluña cuando se convoquen las elecciones que ya anunció el presidente, Quim Torra.
Por parte de Vox reconocen que es más complicado introducir su discurso en aquellas comunidades con un fuerte componente nacionalista, pero a la vez defienden que precisamente por ello es aún más necesaria una voz «de defensa inequívoca del proyecto nacional».
ELECCIÓN DE CANDIDATOS
Para la elección de los candidatos, Vox cuenta con una organización interna que otorga mucho poder a la dirección estatal, sin baronías regionales y los comités provinciales directamente como siguiente escalón. Esto hace que no cuente con líderes autonómicos destacados para estas elecciones.
Según los estatutos, la designación de los candidatos corresponde al Comité Ejecutivo Nacional tras escuchar las propuestas de las direcciones provinciales, que en el caso de Galicia están en manos de gestoras en las cuatro provincias y también en Álava en el País Vasco.
La fecha del 5 de abril marca un calendario electoral por el que los partidos deberán registrar sus candidaturas entre el 28 de febrero y el 2 de marzo. Esto obliga a que elección de los cabezas de lista de Vox vaya a recaer en una dirección que será renovada pocas semanas después, aunque se da por hecho que Abascal continuará al frente del partido acompañado por su núcleo duro.