El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores ha asegurado sentirse «traicionado» por el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo después de que la decisión «política» de frenar la construcción de la Variante de Alba por la falta de consenso social. «Estoy profundamente sorprendido, decepcionado y me siento traicionado», reconocido.

Fernández Lores ha incidido en la «relación de sintonía» que hasta ahora mantenía con el presidente autonómico. Por eso el regidor no entiende que no le hubiese comunicado «directamente» su cambio de postura «y se nos mande a un recadero a dar una noticia negativa», en referencia al portavoz local del PP que anticipó a la prensa la decisión de la Xunta. «Eso es absolutamente cobarde», ha dicho Lores.

El alcalde ha recordado que fue la Xunta quien presentó un «diseño durísimo» al Ayuntamiento asegurando que era «el único trazado posible» para la Variante de Alba y que el gobierno local lo aceptó como mal menor ante los 14 años de retraso que acumula este obra, tan «necesaria» al tiempo que exigió una serie de modificaciones para tratar de «suavizar» el proyecto y «que permita los tráficos peatonales y sea permeable».

«Ahora nos sorprende de una forma incomprensible con la decisión de que no se va a hacer», ha insistido Lores «esa es una decisión política que pensamos que ya estaba tomada cuando se presentó esa barbaridad de trazado y de diseño».

SIN RESPUESTA

Fernández Lores también ha desvelado que lleva desde este jueves intentando ponerse en contacto con Feijóo y que al concejal de infraestructuras, César Mosquera «tampoco se le pone al teléfono» el director de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez.

«Más claro agua, profunda decepción por este comportamiento», ha valorado. Para el alcalde de la ciudad del Lérez, «la conclusión puede ser que volvemos a las andadas y que el Partido Popular no quiere hacer cosas en Pontevedra, esa es la realidad».

Finalmente el alcalde ha recordado a la Xunta su oferta de firmar un convenio para que sea el ayuntamiento quien ejecute ese vial «y quedarnos con ella con las características que el municipio considere», por lo que «el presidente siempre puede rectificar o envainar, como hizo en Verín o con el Hospital Montecelo, o con otras cosas, estamos abiertos a esa posibilidad. Pero lo demás son excusas de mal pagador».

«Aquí hubo una ruptura de un compromiso» ha añadido Lores «si cambiamos y hay cuestiones que justifiquen lo hablamos, pero no me mandes a un recadero para dar una noticia».

RUEDA

El vicepresidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, también se ha referido este viernes al cambio de postura del Gobierno gallego respecto al proyecto de Variante de Alba y ha reiterado «el compromiso de la Xunta de Galicia de invertir en Pontevedra en las obras que sean necesarias y que generen un consenso social».

A preguntas de los periodistas durante un acto en Pontevedra, Rueda ha asegurado que «nosotros no renunciamos a esa inversión» pero la supeditan a que el ayuntamiento «ejerza de motor para conseguir ese consenso y poder ejecutar un trazado sin el rechazo que tiene ahora mismo».