Los socialistas exigen al alcalde que cumpla con la ley, como aseguran que indica un informe de la secretaría municipal
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 8 (EUROPA PRESs)
EL PSOE provincial de A Coruña ha exigido al alcalde, Francisco Calo, y al gobierno municipal de Outes la expulsión inmediata del concejal no adscrito Antonio Caamaño de sus funciones ejecutivas, después de hacerse firme su expulsión del PSOE.
En un comunicado, los socialistas destacan que la ley debe cumplirse «sin excepción» y recuerdan que existe un informe de la secretaría municipal en el que se concluye que, una vez expulsado del partido por el que fue elegido, Caamaño no puede ver mejoradas sus condiciones laborales ni mantener beneficios derivados de la moción de censura.
Por ello, el PSOE subraya que debe recuperar exactamente la situación en la que se encontraba con anterioridad: sin sueldo y sin delegaciones.
El PSOE de A Coruña asegura que esta situación supone una vulneración de la normativa vigente y de los principios de legalidad institucional, por lo que reclaman que el Ayuntamiento de Outes reponga la legalidad de forma urgente, adoptando las medidas oportunas para cesar al concejal de las responsabilidades que continúa ostentando «de forma indebida».
Los socialistas advierten que tomarán las medidas necesarias para garantizar el cumplimiento estricto de la ley y que, si el Ayuntamiento no actúa en los próximos días conforme indica la secretaría, el PSOE llevará el caso a la justicia para que se restituya la legalidad y se depuren responsabilidades.
El PSOE de A Coruña reafirma su compromiso con la transparencia, con la ética pública y con la defensa de un funcinamiento institucional riguroso, siguiendo estrictamente los informes técnicos y la normativa que regula la actividad municipal.
En concreto, el pasado mes de febrero, el popular Francisco Calo alcanzó la alcaldía al prosperar la moción de censura impulsada por el Partido Popular y el que en aquel momento era el único edil del PSOE, José Antonio Caamaño.
El voto del expulsado del PSOE, que había abandonado anteriormente el gobierno local, sirvió para dar la mayoría al PP, frente a los seis que sumaban los cuatro concejales del Compromiso por Outes –partido del hasta encontes alcalde Manuel González– y los dos del BNG.

