El BNG y el PSdeG cuestionan la disolución de Impulsa Galicia, comunicada por la sociedad este jueves con el argumento de que había cumplido «su propósito fundacional, contribuir a acelerar la recuperación económica de Galicia en el escenario pospandemia».
Para el diputado del BNG Brais Ruanova, se trata de «una suerte de borrado de pruebas» y de una «huida hacia adelante» tras dejar como legado «la amenaza de una bomba ambiental», en referencia a la factoría que la multinacional lusa Altri quiere implantar en Palas de Rei (Lugo).
Así, Ruanova se ha referido a Impulsa como paradigma de «la política opaca y de la economía de amigotes y chiringuitos del Gobierno del PP» y que, en su opinión, «está más vigente que nunca».
En este sentido, ha señalado que la entidad, integrada por la Xunta (40%), Abanca (38%), Reganosa (12%) y Sogama (10%), «lleva en el foco del Consello de Contas desde su creación» por la «falta de transparencia en su funcionamiento», así como por «la negativa» del Ejecutivo autonómico a que «pueda ser fiscalizada».
Además, ha puesto el foco en que la sociedad se disuelva sin que haya trascendido «el acuerdo secreto firmado» con Altri en 2021. Un acuerdo que, ha recordado, el BNG reclamó en varias ocasiones.
«POR LA PUERTA DE ATRÁS Y EN VACACIONES»
En esto también ha coincidido la diputada del PSdeG Patricia Iglesias, que ha calificado de «curioso» que se tome esta decisión después de que los socialistas reclamasen el documento «del pacto secreto» con la multinacional portuguesa.
Del mismo modo, la parlamentaria se pregunta qué va a ocurrir con ese acuerdo y si ahora el Gobierno gallego «lo va a mantener a salvo de la fiscalización de las instituciones y del conocimiento público».
En esta misma línea, Iglesias ha cuestionado el cierre de la sociedad «por la puerta de atrás y en plenas vacaciones», al tiempo que ha subrayado que supone «la constatación del fracaso absoluto de la política industrial del PP». «La sociedad fue creada en el 2021 con la promesa de atraer grandes proyectos a nuestro país, ¿y dónde están?», ha manifestado.
En esta disolución, Patricia Iglesias también ve «el modus operandi del PP: crear chiringuitos híbridos de colaboración público-privada para huir del control».
PARLAMENTO
Tras conocerse la disolución, el diputado del BNG ha avanzado que los nacionalistas volverán a reclamar en el Parlamento toda la documentación sobre el memorando de entendimiento para el proyecto de Altri en Palas de Rei, así como explicaciones sobre «cómo se va a recuperar el capital público que la Xunta incorporó» a la entidad.
También Patricia Iglesias ha afirmado que el Grupo Socialista continuará con sus reclamaciones y solicitará el acceso a toda la documentación relacionada con Impulsa Galicia a través de los organismos de transparencia y, de ser necesario, en los tribunales.