El director xeral de la CRTVG, Alfonso Sánchez Izquierdo, ha defendido el tratamiento «estricto, riguroso y profundamente respetuoso con la víctima» de los medios públicos gallegos en relación a la denuncia por agresión sexual contra el exconselleiro do Mar, Alfonso Villares.
Así se ha pronunciado en la Comisión de control de la CRTVG del Parlamento de Galicia, donde ha dado respuesta a una pregunta formulada por la viceportavoz parlamentaria del BNG, Olalla Rodil, quien ha censurado que los medios públicos solo hiciesen «un día y medio» de cobertura informativa sobre este asunto frente a «las más de cinco días en los que el caso Errejón estuvo abriendo los telediarios».
En su intervención, Izquierdo ha sostenido que las preguntas agresiones sexuales «constituyen hechos de una gravedad extrema» que «requieren un tratamiento informativo estricto, riguroso y profundamente respetuoso con la presunta víctima, por encima de todo y con el proceso judicial en marcha». «Y ese fue y sigue siendo el criterio que guió toda las decisiones editoriales adoptada por los equipos de los servicios informativos de la corporación», ha dicho.
El director xeral de la CRTVG ha sostenido que lo primero que se debe de hacer para «proteger a la víctima» es «no desvelar su identidad» antes de que ella misma o el proceso judicial lo desvele. «Y eso fue lo que hicimos», ha defendido para señalar que otros medios sí publicaron la identidad de la denunciante.
«La protección de la identidad de la víctima no es simplemente una obligación formal. Es una expresión de nuestro compromiso real con la dignidad de las personas que sufren o denuncian situaciones de violencia machista», ha afirmado para sostener que «desde que se tuvo conocimiento de la existencia de la denuncia que motivó la dimisión del conselleiro, los profesionales de los medios públicos gallegos elaboraron todos los contenidos informativos con máximo cuidado».
Además, ha afirmado que, excepto el BNG, «ninguna asociación ni profesional ni el Colexio de Xornalistas ni cosa similar» criticó la cobertura. «Nuestra actuación se sustentó en cuatro pilares fundamentales: La protección absoluta de la identidad de la mujer denunciante; el uso del lenguaje preciso, sin eufemismos; la cobertura plural de las reacciones políticas y el seguimiento del caso en lo que se refire a los hechos y no a juicios más o menos paralelos», ha destacado.
CRÍTICAS DEL BNG
Enfrente, la diputada del BNG ha sostenido que no se critica la cobertura informativa sino el «silencio informativo» por parte de los medios públicos. «La protección de las víctimas no pasa por silenciar el caso», ha señalado para comprar este asunto con «el tratamiento informativo que reciben otros casos idénticos» pero que no afectan al Partido Popular.
«Ustedes hacen lo que les pide el PP. Si el agresor o presunto agresor, la persona denunciada es del PP, se pasa de puntillas un día y medio», ha argumentado Olalla Rodil, que ha afirmado que llevan este caso a la Cámara porque «refleja lo que hace el PP con los medios de comunicación públicos» de Galicia.
Todo ello en una intervención en la que Rodil se ha referido al hecho de que la de este miércoles sea la última comparecencia de Izquierdo como director xeral en la Cámara gallega ante el nombramiento de la nueva responsable. «Fueron nueve años, descanse», le ha deseado después de avisar de que el BNG seguirá «defendiendo la Galega, el periodismo y los medios públicos al servicio de la gente del país».