El titular de la Xunta, Alfonso Rueda, considera que la situación del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ya era «insostenible», por lo que ve «imposible» que continúe en el cargo después de que el magistrado del Tribunal Supremo Ángel Hurtado haya acordado procesarlo por un supuesto delito de revelación de secretos contra la pareja de la presidenta madrileña.
«Veremos lo que hace», ha advertido, a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Gobierno autonómico. Al respecto, ha subrayado que, a su juicio, «si antes» era «muy difícil de entender» que siguiese en el puesto, «ahora» es «imposible».
A otra cuestión de los medios de comunicación, en relación con la presunción de inocencia, Rueda ha apuntado que no cree «comparable» el caso del fiscal general con el del ya exconselleiro do Mar, Alfonso Villares, tras una denuncia por agresión sexual.
En este sentido, ha rechazado el «paralelismo», ya que Villares dimitió al ser investigado y «el fiscal acaba de ser enviado a juicio», por lo que entiende «que la situación no tiene nada que ver». «La decisión que se toma –en la Xunta– es muchísimo antes de llegar a esto», ha incidido.