La situación del idioma gallego ha protagonizado este miércoles la sesión del control del Parlamento de Galicia con un cruce de reproches entre la líder del Bloque, Ana Pontón, y el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. Todo ello después de que el Instituto Galego de Estatística (IGE) alertase de que las personas que hablan en castellano superan ya a las que lo hacen en gallego y en la semana en la que el conselleiro de Cultura, Lingua e Xuventude, José López Campos, se reunirá con los grupos para abordar acuerdos para el fomento de la lengua gallega.
En la sesión de control, la portavoz nacional del BNG ha acusado a la Xunta de llevar «15 años» haciendo «bullying al gallego», un «acoso» que ha provocado que esta lengua «se desangre» como consecuencia de sus «políticas lingüícidas». Unas palabras a las que el presidente de autonómico, Alfonso Rueda, le ha respondido afeando al Bloque que use el idioma para la «carga política» y censurando que esta formación se «empeñe» en ser «una especie de policía del gallego».
«Si usted quiere apostar por el conocimiento del gallego, por el respeto a otras lenguas, por el multilingüísmo, por su promoción e entendimiento, entonces podemos encontrar puntos de encuentro. Pero si ustedes se empeñan en seguir siendo una especie de policía del gallego que a todos nos controla, que a todos nos dice en lo que tenemos que hablar… entonces, señora Pontón, vayan guardando la porra, porque los gallegos en libertad seguiremos hablando en lo que nos pete», ha respondido el máximo mandatario autonómico.
En la sesión de control del pleno del Parlamento, la líder de los nacionalista gallegos ha sostenido que en la generación íntegramente educada con el decreto de la «vergüenza» –en referencia al decreto del plurilingüísmo–, «uno de cada tres habla poco o nada gallego» y «solo el 7% de los niños y niñas entre cinco y 14 años hablan siempre en gallego, la mitad que en 2018», ha dicho Pontón.
La líder del Bloque ha considerado que «con esta progresión, el gallego en seis años estará laminado» y Rueda «tendrá una medalla para su currículo», que es «robarle a los más jóvenes su derecho y su libertad a hablar en gallego».
Asimismo, ha advertido de que con el «decreto de la vergüenza» los niños y niñas que entran al colegio hablando en gallego «salen hablando en castellano» y ha apelado a Rueda a «abandonar su política de acoso y derribo con el gallego» con más inversión, derogando el decreto y volviendo al Plan xeral de normalización lingüística». «Son propuestas de mínimos que espero que acepte», ha trasladado en una sesión de control.
RUEDA LE PIDE RESPETO A LAS FAMILIAS
Enfrente, el máximo mandatario autonómico le ha pedido a Pontón que tenga un «poco de respeto a las familias» y le ha afeado «que frivolice» con el «bullying». «Hay comparaciones que realmente sobran», ha considerado.
Dicho esto, Rueda le ha recordado una vez más a la líder del Bloque las palabras del expresidente de la Real Academia Galega, Xesús Alonso Montero, en las que señaló que «la relación del BNG con el gallego es como la de esas madres que quieren tanto a sus hijos que los ahogan», al considerar que son «definitorias».
«Siguen sin entender a la mayoría del pueblo gallego», ha sostenido el presidente, que ha afeado al Bloque que use la lengua para la «carga política de demolición», cuando, en su opinión, el gallego debe de ser «un instrumento, una riqueza que nos identifica para construir puentes».
Además, le ha replicado a Pontón que es la «lengua oficial que más se utiliza en España. El 95% de los gallegos sabe hablarlo, el 97% sabe leerlo y el 85% sabe escribirlo. Nunca antes hubo índices de conocimiento tan altos», ha afirmado.
RUEDA AVISA DEL RIESGO DE LA INMERSIÓN LINGÜÍSTICA
Rueda ha incidido en que son índices mucho más altos que en el resto de comunidades que tienen lenguas propias y ha sostenido también que un informe de la revista española de Pedagogía avisa de que en los últimos años los niños en Cataluña bajaron 21 puntos en rendimiento escolar por la inmersión lingüística que el BNG «quería para Galicia».
«Yo lucharé para evitar lo que quieren ustedes, para quedar bien con sus socios, quieren igualar por abajo y que estemos mal en rendimiento escolar por la inmersión lingüística. Yo no lo voy a tolerar mientras sea presidente de la Xunta», ha subrayado.
Dicho esto, ha sostenido que se debe trabajar para «mejorar los datos» del IGE y ha defendido que las causas de estos datos expuestas por la Xunta son «absolutamente ciertas». «Usted sabe que a Galicia en los últimos años vinieron 115.000 personas que no eran gallegohablantes, lo que se tradujo en alrededor de 25.000 niños escolarizados. Que hay que atraerlos al gallego, por supuestos, pero que eso tiene una incidencia, también y eso usted lo sabe de sobra», le ha respondido a Pontón. Rueda, que ha asegurado que no será la «causa única», ha indicado que sí es «una causa principal».
Tras ello, ha recordado que el conselleiro de Cultura, Lingua e Xuventude, José López Campos, se reunirá este jueves con los grupos para abordar este asunto. «Si usted quiere hablar de esto en serio, si quiere ver cómo atraemos a los neohablantes, cómo seguimos cuidado nuestra habla como elemento de unión, estará con nosotros», ha señalado para considerar que si quiere «seguir con sus dogmatismos nacionalistas» no podrá contar con el grupo del PPdeG ni con la mayoría de los gallegos.
Por su parte, Pontón ha dicho que su formación irá con la «mejor de las disposiciones» a las reuniones convocadas por el conselleiro de Lingua para abordar un pacto por el gallego. «Pero si el tono va a ser el mismo que hoy usted tiene aquí, lo que nos demuestra es que no quieren un acuerdo, quieren una foto», le ha trasladado a Rueda.
Después de que Pontón le afease haber roto «uno por uno» todos los acuerdos sobre el gallego por «intereses partidistas», el presidente de la Xunta le ha recordado a la nacionalista que en el debate electoral le preguntó directamente si quería «instalar un modelo de inmersión lingüística», una pregunta a la que, según ha dicho, la portavoz del BNG «no fue capaz de contestar» porque «tenía instrucciones de ser moderada» para «no asustar a la gente».
«Ahora ya no tiene que disimular», ha dicho para asegurar que ellos «tampoco», por lo que recogerán el testigo que le dieron los gallegos con su apoyo para hacer un «bilingüismo coordial, una convivencia, un respeto a la riqueza que tenemos por tener dos lenguas».
«Donde ustedes quieren un único idioma que arrolle con los demás, que los borre del mapa, nosotros queremos prestigiar nuestro idioma propio pero también que los jóvenes sepan por supuesto castellano y también un tercer idioma para andar por el mundo», ha dicho.
Además, ha avanzado algunas «medidas concretas» para fomentar el uso del gallego, como la oferta de «más de 100 cursos para que las personas que vienen de fuera» aprendan el gallego, «colaborar con organismos que atienden a personas migrantes en las aulas dirigiéndose de forma especial que no nacieron en Galicia», aprovechar el potencial del gallego como puente hacia los hablantes en lengua portuguesa y lanzar un programa de voluntariado lingüístico para crear grupos de conversación entre gallegohablantes y neohablantes, entre otras.
Rueda ha avanzado que serán algunas de las medidas que el conselleiro avanzará mañana a los grupos. «Lo vamos a hacer con una premisa, la de la libertad», ha dicho.
CRITICAS DEL PPDEG
Tras la sesión de control, el PPdeG ha emitido un comunicado a los medios en el que exige a Ana Pontón que rectifique su «frívola» postura respecto al bullyng y pida perdón a las familias y a la juventud gallega que sufre esta «dramática realidad».
Los populares subrayan que «hay comparaciones que sobran» y exigen respeto.